La senda iniciada por Richard Brooks con «Semilla de maldad» ha servido para que, desde aquel año 55, muy diferentes cineastas hayan tratado la problemática estudiantil desde posturas diametralmente opuestas y, en muchas ocasiones, muy distanciadas del discurso progresista del que hacía gala el citado clásico. Obviando aquellos productos que subrayan una concepción fascista acerca de lo que debe ser una metolodología educativa impartida por ex marines descerebrados, destacan las honrosas excepciones donde se establece una conexión lógica entre los problemas que dividen a profesorado y alumnos. Porque más allá del evidente choque generacional, lo que se intuye es la complejidad de un conflicto enraizado en la misma sociedad que cada día amanece más multicultural, desorientada y desencantada. Para colmo de males, hacen acto de presencia los gobernantes y apuestan por una concepción funcionarial educativa desordenada que termina por lastrar definitivamente este equilibrio imposible. Cantet no es ajeno a estas situaciones, en «Recursos humanos» y «El empleo del tiempo» captó con incisiva pericia estos desórdenes sociales que se manifiestan cuando se salta la tragedia. En esta oportunidad, el instituto que retrata «Entre les murs», no arde pero sí rebosa de un buen puñado de hormonas disparadas, lo cual, a veces, resulta peor. La cámara apenas sale del aula en la que François Bégaudeau se interpreta a sí mismo dando vida al profesor de un instituto que utiliza la charla directa con sus alumnos para impartir sus clases. La principal virtud de este método no radica en su efectividad, ya que, manteniendo una lógica distancia, el profesor trata a sus alumnos como a seres racionales. Ello no impide que, en situaciones concretas, se encienda la inevitable chispa que hará saltar por los aires la complicidad profesor-alumno y el adulto pierda el control de la situación. Para que todo ello resulte creíble, merece destacar la labor interpretativa de Bégaudeau -profesor en la vida real y autor de la novela en la cual se basa el filme- y la labor coral de los chavales.