El presidente boliviano, Evo Morales, suspendió de manera indefinida la actividad de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) por haber intervenido en «actos de conspiración y en intentos de golpe de Estado».

El gobernante MAS afirmó que la DEA es «una excusa» de Washington para intervenir política, militar y diplomáticamente en varios países de Latinoamérica utilizando el tema del narcotráfico.

«Es el operador militar y político de la embajada de EEUU», afirmó el jefe del MAS en el Parlamento, César Navarro. Alertó que es uno de los peligros más fuertes para la soberanía de los pueblos. «Se ocupa de tener una infiltración política y, en este último periodo, ha tenido una relación muy estrecha con los desestabilizadores de Bolivia», resaltó.