El auto de procesamiento de Aspiazu contradice acusaciones de Rubalcaba
Ni se le considera autor de la muerte de dos guardias civiles en Capbreton ni consta que hubiera un solo gramo de hach�s entre lo incautado en la casa de Cauterets en la que lo detuvieron. El auto de procesamiento que ha llevado a la c�rcel a Garikoitz Aspiazu y Leire L�pez Zurutuza no recoge ninguna de estas imputaciones en las que tanto hincapi� ha hecho durante toda esta semana, y hasta ayer mismo, el ministro espa�ol del Interior, Alfredo P�rez Rubalcaba.
GARA |
El pasado 4 de noviembre el ministro del Interior, Alfredo P�rez Rubalcaba, afirm� que uno de los detenidos recientemente en Nafarroa declar� a la Polic�a que Garikoitz Aspiazu le confes� que fue �l quien dio muerte a los guardias civiles Fernando Trapero y Ra�l Centeno en Capbreton. A lo largo de toda esta semana ha insistido en ello. Sin embargo, el auto por el que la juez francesa Laurence Le Vert env�a a prisi�n a Aspiazu no recoge ninguna participaci�n directa del detenido en aquel tiroteo. Su inculpaci�n es la de ser dirigente de la organizaci�n que reivindic� el hecho.
Adem�s, primero a trav�s de una filtraci�n a �La Raz�n� y despu�s directamente a trav�s de las palabras del propio ministro, se ha asegurado que a los detenidos en Cauterets se les hab�an confiscado cien gramos de hach�s. Ayer mismo Alfredo P�rez Rubalcaba declaraba en Radio Nacional de Espa�a que le sorprendi� esta incautaci�n, puesto que �aparte de que no es una cantidad menor, me llama la atenci�n su doble moral�, es decir, c�mo los miembros de ETA luchan �contra los narcotraficantes en nombre de una supuesta pureza de la juventud vasca� y luego ellos �olvidan predicar con el ejemplo�.
Sin embargo, en la larga lista de cargos que Le Vert imputa a Garikoitz Aspiazu y Leire L�pez Zurutuza -�posesi�n de documentaci�n falsa, posesi�n de armas y municiones de la categor�a 1 y 4 sin autorizaci�n, falsi- ficaci�n y uso de matr�culas falsas, receptaci�n, y robo en banda organizada�- tampoco figura la tenencia de sustancias estupefacientes ilegales.
Los dos detenidos pasaron el pasado jueves por la noche a disposici�n judicial y ambos se negaron a declarar. La juez Le Vert orden� el ingreso de Garikoitz Aspiazu en la prisi�n de La Sant� y de Leire L�pez Zurutuza en Fresnes.
Denuncia
Antes de que las agencias espa�olas de noticias comenzaran a recoger que Garikoitz Aspiazu no estaba directamente implicado en las muertes de Capbreton, el movimiento pro-amnist�a ya hab�a difundido una nota en la que se�alaba que tal acusaci�n no exist�a y que tampoco figuraba en el sumario la posesi�n de hach�s.
Por esto y lo acontecido en los �ltimos d�as, denunciaban que tras esta redada ha habido una �gran operaci�n medi�tica� en la que �se han inventado mentiras� y �Rubalcaba ha confirmado acusaciones que no figuran en ning�n sumario�. El movimiento pro-amnist�a tambi�n ha denunciado el papel de los grandes medios de comunicaci�n espa�oles que en lugar de informar con objetividad se han convertido en altavoces del ministro del Interior, expandiendo a los cuatro vientos las invenciones de Rubalcaba.
Las autoridades judiciales espa�olas han solicitado la entrega temporal de Garikoitz Aspiazu para avanzar en la instru- cci�n de sus causas pendientes.
Desde instancias espa�olas hay quejas por la lentitud francesa en desencriptar los ordenadores incautados, algo sumamente dif�cil sin tener la clave. Los �ltimos detenidos por la Guardia Civil s� la declararon durante el interrogatorio.