El Ejército israelí mata a un miliciano de la Yihad Islámica en Cisjordania
Un miliciano de la Yihad Islámica murió ayer por disparos del Ejército israelí cerca de la ciudad cisjordana de Yenín. Sus compañeros respondieron lanzando cohetes contra posiciones israelíes en el Neguev. Israel volvió a bombardear Gaza una vez más. La tregua es una ilusión.GARA |
El Ejército israelí mató ayer a Yihad Nawahda, de 23 años y miliciano de la Yihad Islámica en la aldea de al-Yamun, cerca de Yenín, en Cisjordania. La Yihad Islámica respondió lanzando desde Gaza cohetes artesanales contra posiciones israelíes en el Neguev. Israel volvió a bombardear Gaza.
Junto a ello, la Yihad Islámica volvió a mostrarse favorable a que no se renueve la tregua que Hamas firmó con Israel y que concluye el próximo viernes, al considerarla contraproducente para los intereses de la resistencia palestina. «La tregua con el enemigo no nos ha permitido lograr nuestro objetivo [acabar con el bloqueo en Gaza] y representa una amenaza contra los intereses de nuestro pueblo», señaló la Yihad Islámica en un comunicado.
De este modo, la Yihad Islámica se reafirma en la postura que mantuvo en las conversaciones mantenidas con Hamas y otros grupos, como el izquierdista FPLP, para valorar la conveniencia de renovar la tregua. Todos ellos coincidieron en señalar que Israel ha roto el alto el fuego en repetidas ocasiones y que el Estado sionista es el único beneficiario de esta tregua.
Quien sí se manifestó a favor de la renovación de la tregua fue el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas (al-Fatah). «Esperemos que la tregua no acabe. Llamamos a todas las partes a que la mantengan para no agravar los sufrimientos de nuestro pueblo», proclamó. Sin embargo, Abbas adoptó una decisión que provocó el enfado de Hamas, ya que anunció que convocará elecciones legislativas anticipadas.
Mientras, el presidente del Parlamento palestino, Aziz al-Doweik, fue condenado a tres años de prisión por un tribunal israelí debido a su militancia en Hamas.
El Cuarteto para Oriente Medio (EEUU, Rusia, UE y Rusia) destacó «la irreversibilidad» de Annapolis, ante la incertidumbre de las elecciones israelíes y el Gobierno de Obama.