Un miliciano de las Brigadas de los Mártires de al Aqsa, brazo armado de al Fatah, murió en un ataque de la aviación israelí. La víctima fue identificada como Ali Hijazy, de 24 años. Otras cuatro personas -tres milicianos al Aqsa y un civil- resultaron heridas de gravedad, según informó el director del departamento de Emergencias y Ambulancias del Ministerio palestino de Salud.

Testigos relataron que el ataque se produjo sobre las 9.00, hora local. Un avión israelí lanzó al menos tres misiles contra el grupo de milicianos.

En un comunicado, el grupo armado advirtió que «no tardarán en responder. La respuesta debe venir de todos los grupos palestinos», declaró a AFP el portavoz Abu Thaer. En el entierro de Hijazy -que hoy iba a casarse-, varias decenas de hombres armados dispararon al aire y apelaron a la «venganza y a los atentados suicidas en Tel Aviv». La comitiva estaba compuesta por un millar de personas.

Un portavoz de Hamas, Fawzy Barhoum, se sumó al llamamiento de las Brigadas de los Mártires de al Aqsa afirmando que «la resistencia palestina debe responder al crimen contra el pueblo palestino».

Asimismo, instó a la comunidad internacional a presionar a Israel para «detener los asaltos, en lugar de culpar a la víctima».

Por su parte, el líder de la Yihad Islámica, Jalid al Batsh, subrayó que su movimiento está preparado para tomar represalias ante nuevas incursiones. «Las demás opciones aparte de la resistencia han fallado y cualquier agresión israelí será frenada», remarcó.

Este bombardeo tiene lugar justo 24 horas después de que las milicias palestinas acordaran por unanimidad no renovar el alto el fuego al considerar que Israel estaba incumpliendo su parte del acuerdo.

Durante el cese de hostilidades, los grupos armados palestinos se comprometieron a dejar de lanzar cohetes y proyectiles de mortero contra las localidades vecinas en Israel, que debía por su parte, suspender sus ataques en Gaza y levantar progresivamente el bloqueo.

En los primeros cuatro meses, ambas partes evitaron los enfrentamientos, aunque el Gobierno sionista no suavizó el cerco a Gaza. A principios de noviembre, una operación militar israelí acabó con la vida de seis miembros de Hamas. Desde entonces, grupos armados han disparado más de 200 cohetes y proyectiles de mortero.

Petición a Egipto

Por otra parte, dos niños palestinos sufrieron heridas de metralla de un proyectil lanzado por Israel en Beit Hanoun, también en el norte de Gaza. Su situación no era grave.

Mientras, decenas de estudiantes y personas con pasaporte extranjero se congregaron frente a la embajada egipcia de Gaza para pedir que el Gobierno de Egipto abra el paso de Rafa y termine con el sufrimiento de la población de Gaza, sometida a un férreo bloqueo.