La dirección de Esmaltaciones San Ignacio dio ayer un giro a su postura en el conflicto que mantiene con la plantilla al proponer un plan de bajas voluntarias con indemnizaciones a las que puede acogerse cualquier trabajador. Hasta ahora, Esmaltaciones sólo planteaba un expediente de regulación de empleo (ERE) que suponía la extinción de 35 contratos.

La empresa de Gasteiz ha dado a los trabajadores de plazo hasta el miércoles a las 15.00 para que decidan si se acogen a estas bajas. Las indemnizaciones serán de 20 días por año trabajado con un máximo de 16 mensualidades para los menores de 62 años y con un máximo de 12 mensualidades para los mayores de esa edad.

No obstante, la empresa no renuncia al ERE en caso de que co este plan no consiga eliminar los 35 empleos que ha establecido en su ajuste. Incluso si no completara esa cantidad, está dispuesta a aplicar la lista de afectados por el expediente que ha elaborado.

El comité estimó que mejora con creces la oferta que la empres realizó en diciembre, pero advirtió de que sólo será una solución si consiguen 35 voluntarios que quieran abandonar la empresa y trasladará su contenido a la plantilla en una asamblea que tendrá lugar el lunes.

Con todo, fuentes sindicales subrayaron que si 35 personas deciden acogerse a estas bajas se habría evitado el expediente y los despidos traumáticos, lo que consideraron un éxito en la lucha que mantienen.

Por otro lado, el comité criticó la forma en que la empresa ha llegado a esta situación, ya que ha retrasado una y otra vez las reuniones «para abocarnos a una final como la de hoy en la que no tengamos ningún tipo de plazo para formular otro tipo de propuestas».

La empresa se negó a aumentar las indemnizaciones argumentando que una cuantía mayor le llevaría al cierre o que si pensara cerrar la planta de Gasteiz podría realizar esa oferta, pero aseguró que pretende mantener la producción.

Contrainforme y reunión

Puesto que la amenaza del ERE se mantiene, el próximo martes el comité presentará su informe contrario ante el juzgado mercantil encargado del proceso concursal en el que está inmersa Esmaltaciones.

El miércoles volverá a reunirse con la dirección de la empresa para estudiar la nueva situación en función de la acogida que haya tenido el plan de bajas incentivadas, pero insistió en que «no aceptaremos ningún tipo de salida traumática».