La asociación Aides de lucha contra el Sida llevó a cabo ayer un coloquio en Biarritz en el que se reunieron profesionales, militantes contra esta enfermedad y, sobre todo, personas que viven con el VIH. 27 años después del comienzo de la pandemia, valoraron que el balance es «inquietante».

En la cita celebrada en la ciudad balnearia, en la que tomaron parte representantes de agrupaciones médicas e institucionales, se organizaron talleres temáticos con el objeto de constatar y enumerar las preocupaciones y las necesidades colectivas. «Escuchar lo que los usuarios tienen que decir es un elemento esencial para poder alcanzar la calidad de los servicios» declaró el profesor Jacques Blang, del Hospital Universitario de Estrasburgo.

Apuntó además, que hay diferentes tipos de problemas tanto de acceso a los cuidados médicos, como sociales o estructurales. También se trataron temas como la salud sexual y la prevención, el lado social de la enfermedad, los efectos indeseables de los tratamientos y las relaciones entre afectados y trabajadores sanitarios.

El envejecimiento de las personas seropositivas es, asimismo, un tema se plantea después de 25 años de pandemia.