Los vecinos de Muskiz reprochan a EA que incumpla sus promesas
Mientras el presidente de Petronor, Josu Jon Imaz, no pudo ocultar ayer su satisfacción por que el Ayuntamiento de Muskiz les haya concedido las licencias para construir la planta de coque, la indignación entre los vecinos que se oponen a la URF se mostró en el pleno celebrado el jueves a la tarde. Dentro y fuera de la casa consistorial, pues el alcalde restringió el acceso, se escucharon reproches a los ediles de EA por incumplir las promesas que les dieron la Alcaldía.
A.G. |
Una concentración, junto a la Casa de Cultura de Muskiz, congregará hoy al mediodía a los vecinos de Meatzeta que se oponen al proyecto de la Unidad de Reducción de Fueloil (URF). Será una muestra más del rechazo ciudadano a la planta, que se ha encrespado tras la decisión de Eusko Alkartasuna de otorgar las licencias a Petronor.
En el pleno celebrado el jueves, el alcalde, Gonzalo Riancho, limitó el acceso a la casa consistorial, lo que no impidió que los opositores a la URF, muchos de ellos residentes en el barrio de San Julián, manifestasen fuera y dentro sus quejas. Ha sido la primera ocasión en que esto sucede en este Ayuntamiento.
En el turno de ruegos y preguntas, recriminaron a EA «que ha engañado al pueblo, incumpliendo el programa electoral que les permitió alcanzar la Alcaldía». Además, les recordaron que en enero de 2008 aprobaron una moción en la que se rechazaba el proyecto de la petrolera y se anunciaba que no concederían las licencias municipales pertinentes.
A la salida del Pleno, los vecinos aguardaron a Riancho, al que acompañaron en su paseo desde el Ayuntamiento hasta la sede de EA, portando carteles y coreando consignas en las que pedían su dimisión por «engañar al pueblo de Muskiz».
Tras un par de días de silencio, el presidente de Petronor, Josu Jon Imaz, avanzó que prevén iniciar la construcción de la polémica planta, si se cumplen los plazos, a finales de febrero. «Creemos que a finales de este mes podamos estar en una fase física de comienzo de obras, siempre que pasemos todos los aspectos administrativos y legales en un tiempo razonable, y esperamos que la planta pueda entrar en funcionamiento en el primer trimestre de 2001», declaró a los periodistas.
A su vez, la izquierda abertzale denunció «la falsedad política y el engaño a la población que ha supuesto la actitud de EA en estos meses». Tras enumerar las decisiones adoptadas por representantes del partido que lidera Unai Ziarreta respecto al proyecto, la apoderada Begoñe Agirre les acusó de falta de «coherencia y dignidad» por incumplir su compromiso electoral con sus votantes y con todos los muskiztarras.
Asimismo, la juntera independentista incidió en su intervención en que «a estos partidos políticos vendidos les interesa que no participemos en las instituciones, les interesa apartarnos de las elecciones».
La izquierda abertzale apuesta porque se dé la posibilidad a los vecinos de Muskiz para que opinen sobre su posición ante el proyecto de la planta de coque. La Coordinadora Anti-Coke aguarda para saber si se permitirá.
«Somos conscientes de que no somos el vecino más guapo del pueblo, pero sí que generamos empleo y respondemos a una necesidad como es la de tener combustibles limpios para llenar el depósito de nuestros coches».
