Aunque parezca un galimatías, Osasuna debe acabar hoy con una racha para prolongar otra. La primera le ha convertido en el único equipo de la categoría que todavía no conoce la victoria como visitante; la segunda, con siete puntos sumados en las tres últimas jornadas, le ha permitido abandonar los puestos de descenso, a los que ha parecido condenado sin remedio desde que comenzó la Liga.

Es evidente qué objetivo corresponde a cada racha. No tanto si los rojillos lo conseguirán, ante un rival que mantiene el nivel de dificultad de los anteriores, por mucho que el famoso Everest liguero se haya dado ya por superado. Tras el bajón que le supuso ese mismo tramo del calendario, el Deportivo intenta remontar de nuevo el vuelo. Y aunque el empate que rascó la semana pasada en Mallorca le apeó de posiciones europeas, un triunfo ante Osasuna permitiría regresar a la sexta plaza a los gallegos, que incluso empiezan a hablar ya de Champions.

Motivación, por tanto, no faltará en el cuadro de Miguel Angel Lotina que, a cambio, afronta el choque contra su ex equipo con bajas en todas las líneas y su próxima cita europea -el miércoles se enfrenta al Aalborg- en el horizonte. Las de Manuel Pablo en defensa, Antonio Tomás en el centro del campo y Riki en ataque serán las principales ausencias del once deportivista, en el que, en consecuencia, podrían entrar jugadores como Sergio, Juan Rodríguez o el delantero del filial Lassad Noui Oui.

También habrá novedades en el once rojillo, ante las bajas de Sergio y Pandiani que, en principio, José Antonio Camacho cubrirá con César Cruchaga y Dady, respectivamente. El técnico, además, recupera a Javad Nekounam -siempre y cuando no se retrase su llegada, prevista para hoy mismo- que, como Antonio Hidalgo, puede hacerse hueco en el once, en detrimento de Vadocz y Masoud.

Camacho, además, incluyó al central del Promesas Jon Etxaide en la convocatoria.