Duras críticas de Ziburu Aitzina al alcalde Poulou
Los concejales de la oposición (PS+abertzales) de Ziburu han criticado sin ambages la política municipal «antidemocrática y amiguista» que lleva a cabo el alcalde de la UMP Guy Poulou. La falta de un plan urbanístico provoca, a su juicio, que «en Ziburu se haga lo que él quiera».
Arantxa MANTEROLA |
El grupo de concejales de la oposición Ensemble pour Ciboure-Ziburu Aitzina (ZA) compuesto de cinco concejales, (tres socialistas y dos abertzales) ha criticado duramente la gestión del alcalde de la UMP, Guy Poulou.
Dominique Duguet, que encabezó la lista de oposición, y Ramuntxo Mintegi, acompañados de los demás concejales y de varios miembros de su equipo, no se limitaron a efectuar el balance del primer año de esta legislatura sino también de la política que está llevando a cabo Poulou en los últimos años desde su posición de alcalde.
Criticaron sin ambages el funcionamiento «antidemocrático y amiguista» del Ayuntamiento labortano, del que hicieron responsable al primer edil «que se ha rodeado de asesores muy bien remunerados» que, a decir de los miembros de ZA, fijan y deciden los proyectos y actuaciones municipales «sin tan siquiera tener en cuenta a los concejales de su propio grupo, que se limitan a aprobar sin debate alguno lo establecido por el equipo de Poulou».
Sin plan urbanístico
Los concejales de ZA desglosaron las cuestiones, a su entender más graves, que en estos momentos afectan al consistorio ziburutarra y, por tanto, a sus habitantes. Entre ellos, la falta del PLU (Plan Local de Urbanismo) inacabado desde 2001 y que, tras ser presentado a la administración estatal en 2007, debe ser «reelaborado» totalmente por las graves irregularidades que contenía.
La falta del PLU, además de impedir contar con una normativa global para el desarrollo de Ziburu, provoca que se vayan autorizando y realizando proyectos de manera dispersa e incoherente. «No hay una política urbanística coherente y Poulou aprovecha esta situación para servir a sus amigos», criticaron.
Duguet y Mintegi ennumeraron varios casos «graves» sucedidos estos meses, como el de la reciente concesión de la casa de los Bloques situada en el puerto de Zokoa a un empresario viticultor. «No estamos en contra de que se instale esa actividad, pero no entendemos por qué tiene que ser en ese lugar, que está destinado a uso público como lo establece la claúsula de reserva en vigor» añadieron, matizando que como alternativa propusieron el terreno donde iba a ser construido el casino, proyecto que ha quedado «definitivamente» abandonado, de lo cual se congratularon. También criticaron el aumento del endeudamiento municipal (+44% en 2008) y la «inexistente» actuación en favor del euskara ya que, tras adoptar el convenio para su promoción, ni siquiera se ha abordado el diágnostico.