La Ertzaintza ha remitido a la Fiscalía de la Audiencia Nacional española y a la del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) la documentación y el material relacionado con la detención del vecino de Villabona Manex Castro, arrestado el pasado día 1 y que tras permanecer cinco días incomunicado denunció haber sufrido malos tratos y amenazas a manos de la Policía Autonómica.

Fue el Departamento de Interior quien dió cuenta de este hecho, que se produce días después de que la portavoz de Lakua, Miren Azkarate, afirmara que la estancia de Castro en dependencias policiales había sido registrada en vídeo, y que desde el movimiento pro amnistía le respondieran instando a que hiciera públicas las grabaciones.

Entre el material enviado a los fiscales se encontraría, además del citado material videográfico, una relación de todo el proceso de detención, que incluye los reconocimientos médico-forenses, la información facilitada a los familiares y el contacto con los mismos para hacer llegar al detenido objetos personales.

Los allegados de Castro denunciaron, sin embargo, que la Policía autonómica no les dio ninguna información sobre el estado y el paradero del joven, y que sólo les citó el mismo día 1 para que llevaran ropa a la comisaría de Hernani, donde ni siquiera se hallaba el detenido.

Solidaridad desde Argentina

Por otra parte, Mikel Garmendia, joven de Hernani detenido en la misma operación policial, ha recibido sendos mensajes de solidaridad llegados desde Argentina, de la mano de la Gremial de Abogados y de la Agrupación Martín Fierro.

El colectivo de letrados, «repudia enérgicamente» la detención «del compañero Mikel Garmendia, en una nueva escalada de represión al Pueblo Vasco y sus organizaciones», y anuncia que «denunciaremos nacional e internacionalmente ésta nueva detención y seguiremos reclamando por la libertad de todos los presos políticos vascos». La Agrupación Martín Fierro, por su parte, recuerda que «hemos conocido, vivido y compartido mates y sueños con Mikel» y otros militantes internacionalistas vascos, y manda «un abrazo revolucionario» a todos ellos.

Iraitz Santa Cruz, igualmente detenido, recibió ayer el apoyo de 150 estudiantes y trabajadores del instituto Miguel Altuna de Bergara, donde trabaja.