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REMONTE

Ezkurra y Urrutia viven una pesadilla frente a un trío impecable en ataque

GARA | HERNANI

El curioso estelar remontista de ayer en Galarreta de Hernani dejó un inusual resultado en contra de Ezkurra y Urrutia, que perdieron por un conduntende 16-40 frente al trío copuesto por Uterga-Altuna II-Iriarte. El enorme desequilibrio en el estelar planteado tiene dos explicaciones.

Por un lado, el trío dio una lección de buen remonte, cada deportista en su sitio. Iriarte fue un coloso en la zaga e hizo 11 tantos, 7 de ellos de saque, jugada con la que destrozó a sus rivales. Y Altuna II pegó con violencia, demostró su excelente estado de forma y fue un manijero de lujo en el centro de la cancha, así hasta superar ampliamente a un Ezkurra desconocido. El tercero del trío, el puntillero Uterga, acabó con listeza las oportunidades que le llegaron (9 remates en su cuenta).

La otra explicación reside sin duda en el pésimo encuentro de Ezkurra y Urrutia. Al delantero se le vio cohibido, fuera de juego, obligado a entrar todo el tiempo a la contra, y se topó además con dos delanteros tremendamente acertados. Por su parte, Urrutia fue la sombra del zaguero que suele ser: ni acertó con el saque ni hizo daño con su toque, y además se vio una y otra vez descolocado, con grandes problemas para devolver a buena los envíos de sus rivales.

El segundo estelar de la tarde dejó un precioso partido en el que Iñigo-Ion ganaron por la mínima a Juaristi-Agirrezabala (39-40).

Pala

Por otro lado, Gaubeka-Aierbe y Ziskar II-Galán protagonizaron un espectacular encuentro en el Deportivo de Bilbo, dentro del Campeonato de Euskadi de Pala, con victoria para los primeros por 45-42.

Hubo dos partes claramente diferenciadas. Una primera de recital por parte de los derrotados, con un Ziskar sobresaliente y un seguro Galán ante unos ansiosos Gaubeka y Galán. Con el 23-33 a favor de los azules se pasó a un 35-33, que al final fue determinante.

A Ziskar se le fue la inspiración y Gaubeka y Aierbe empezaron a meter en el verde, mientras que Galán estaba bien en defensa pero mal en ataque. De todas fomas, el bajón de Ziskar fue la clave. De jugar de cine, pasó a fallar casi todo.

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