Victoria importantísima en Zaragoza
«A presidente nuevo, salvación segura», opinan en Donostia
Panko y Popovic guiaron a un conjunto donostiarra que dominó el marcador de cabo a rabo, a pesar de la descalificante de Doblas.
CAI ZARAGOZA 79
BRUESA GBC 92
Arnaitz GORRITI | BILBO
Reza el adagio, al menos en el fútbol, que «a entrenador nuevo, victoria segura». Tal vez en Donostia, por lo menos los seguidores al baloncesto podrían proponer algún cambio en el dicho para que donde pone «entrenador», ponga «presidente».
Desde luego que el estreno de Gorka Ramoneda al frente de San Sebastian Gipuzkoa Basket no pudo saldarse mejor. A estas alturas cualquier victoria es buena, pero si es a domicilio frente a un rival directo por eludir el descenso, el mérito se vuelve gesta y casi triple salto mortal sin red. Desde luego que ayer los de Laso dominaron de cabo rabo y, pese a perder a Doblas por cometer dos faltas antideportivas, lo que equivale a una descalificante, antes del descanso, dieron un paso enorme camino de la salvación. Bruesa GBC consiguió dejar a una victoria de distancia al CAI Zaragoza y empatar a nueve victorias con el CB Granada y el MMT Estudiantes, al que, casualmente, se enfrentarán en Illunbe antes del final de liga. Además, los donostiarras abrieron otra victoria de brecha sobre los puestos de descenso.
Los guipuzcoanos se pusieron por delante desde el inicio y no abandonaron jamás, salvo en el primer intercambio de canastas, el liderato. Panko, que en Donostia está hallando su rol y Popovic -que anotó sus 12 puntos desde la línea de tiros libres, fruto de sus buenas decisiones en penetración- marcaron la pauta de los de Laso, que obtuvieron una efectividad muy alta en el tiro y que mantuvieron el pulso firme a la hora de finiquitar el partido desde la línea de tiros libres.
No obstante, no conviene perder de vista el buen partido de Alex Urtasun, que con tres triples en el segundo cuarto abrió la brecha del conjunto donostiarra, amén de la incansable brega de Carlos Andrade y las buenas prestaciones no sólo de Lou Roe y Hopkins, sino de Marconato, que aprovechó muy bien sus minutos. Con la incertidumbre de ver cómo afrontarían el partido los de Laso sin Doblas, al descanso se llegaba con una cómoda ventaja: 33-44.
Más ventaja, solaz y disfrute
Bruesa GBC no sólo superaba ayer el registro de victorias obtenidas hace dos años, sino que, casi con total seguridad, jugó su mejor partido en la Liga ACB. Sólo así se comprende que, en vez de sufrir el asedio de los de Angulo, los guipuzcoanos tuvieran hasta tiempo de disfrutar, después de gozar de una máxima ventaja de 24 puntos, 38-62, tras triple de Hopkins. Sólo Quinteros y Zizic daban la talla entre los maños.
La novena victoria estaba a un cuarto de distancia y, con 51-69 en el marcador, los hombres de Laso, una vez más guiados por los más veteranos, supieron nadar y guardar la ropa, soportando con sapiencia el empuje desesperado de los de Alberto Angulo, que jamás tiraron la toalla, pero igualmente nunca estuvieron ni cerca de imponerse.
Obviamente, no conviene relajarse, pero Bruesa GBC debe tener la salvación con un par de victorias más. El paso más difícil lo dio en el partido de ayer.
En los últimos partidos, Bruesa GBC estaba presentando un pésimo porcentaje de tiros de campo. Sin embargo, en la jornada de ayer los de Laso rozaron el 50%, dominando en el marcador de principio a fin.
Es obvio que a Tau Baskonia le es indiferente que Bruesa GBC baje de categoría o se mantenga. Sin embargo, su victoria a domicilio frente al CB Murcia le supuso al conjunto guipuzcoano un favor inmenso por parte de su vecino.
El cuadro donostiarra tiene el average perdido respecto al murciano, de modo que no le conviene acabar con el mismo número de triunfos. Otro tanto de lo mismo le pasa con un Cajasol que parece que ha encontrado la fórmula para remontar el vuelo. Mientras, el próximo rival de los de Pablo Laso no será sino el Alta Gestión Fuenlabrada, un conjunto que lucha por jugar el play off, pero que baja bastante fuera de casa. Habrá de verse si los guipuzcoanos exhiben el mismo nivel que en el vital encuentro de ayer.
G.