Durante esta madrugada se cumplirá un año desde que el alcalde de Bilbo, Iñaki Azkuna, colocó la bandera española en el Ayuntamiento de la capital vizcaina. Consciente del rechazo que despierta entre la ciudadanía, el primer edil jeltzale aprovechó la oscuridad de la noche para hacer ondear la enseña rojigualda en lo alto del Consistorio. Azkuna tampoco escuchó las peticiones de numerosos agentes sociales y políticos de la ciudad que le pidieron que no cumpliera la orden emitida por el TSJPV.

Cientos de personas volvieron a denunciar ayer en las calles de Bilbo que «las banderas impuestas no tienen sitio alguno en el Ayuntamiento», como declaró el ex concejal de Euskadiko Ezkerra, Jon Nikolas, al término de la movilización.

Nikolas fue uno de los convocantes de la manifestación organizada a iniciativa del Foro de Debate Nacional y dentro de los distintos actos organizados para ir calentando el próximo Aberri Eguna. Decenas de ikurriñas dieron colorido a una marcha en la que personas de «diferentes ámbitos y sensibilidades», tal y como resaltaron los convocantes, reclamaron que debe ser la enseña vasca la única que ondee en lo alto del Consistorio.

Según aseguró el ex concejal de Euskadiko Ezkerra, la ikurriña es el «símbolo que nos une a todos» y, por ello, realizó un llamamiento para «unir fuerzas a favor de la bandera del cambio».

«Tiempos de cambio»

Tres ikurriñas portadas por parejas de dantzaris abrieron la manifestación que partió desde la plaza Arriaga hacia la plaza Circular. En la pancarta se podía leer el lema de la convocatoria: «Aldaketa garaia! Burujabetza garaia! Geurea ikurriña!».

Durante el recorrido se corearon insistentemente lemas a favor de la independencia y la ikurriña y contra la bandera española. Al llegar hacia el Ayuntamiento bilbaino se escucharon también consignas contra el PNV al que calificaban de «español».

En las escalinatas del Ayuntamiento un grupo de dantzaris bailó un aurresku de honor y, después, Maider González y Jon Nikolas dieron lectura a un comunicado en euskara y castellano en el que reivindicaron «el derecho a decidir libremente nuestro futuro».

«Somos una nación negada, pero que tiene identidad propia y quiere ser dueña de su futuro», resaltaron.

En este sentido, aseguraron que «somos muchos los que queremos salir de la jaula en la que nos encontramos y volar hacia la libertad». A su juicio, «corren tiempos de cambio» en Euskal Herria y por ello, creen que es necesario «juntar todas las fuerzas que existan a favor del cambio y encaminarlas hacia la obtención del derecho a decidir».

Asimismo, realizaron un llamamiento a la ciudadanía para que acuda al Aberri Eguna impulsado por el Foro de Debate Nacional que se celebrará el 12 de abril con una marcha entre Irun y Hendaia y a colocar ese día ikurriñas en los balcones.

Por otro lado, Atarrabia también acogerá esta tarde una manifestación popular a favor de la ikurriña después de que el pasado miércoles el alcalde de Nafarroa Bai, Pello Gurbindo, acatara el fallo del TSJN y retirara la enseña vasca del mástil. La izquierda abertzale de Nafarroa calificó lo ocurrido de «nueva agresión a los simbolos de nuestro pueblo» y lo situó dentro de la estrategia de imposición que impulsa el tándem UPN y PSN para «blindar» la Constitución y el Amejoramiento.