Raimundo Fitero
Atravesados
La reunión del G-20 y sus adjuntos, las manifestaciones de la juventud más lúcida reprimidas de una manera violenta por la policía, que es exactamente igual en todas las partes del mundo: policía, no hace falta añadir nada más, van proporcionando una suerte de película en doble versión, con la espuma de las decisiones y con el núcleo duro de las causas. Así que resulta que con potenciar más el FMI, la institución que ha sido la encargada de crear el caos monetario y económico global, se soluciona la crisis, cosa que saben hasta ellos que es mentira. Lo único que hacen es reforzar sus obsoletas teorías capitalistas, aunque las quieran disfrazar con discursitos un poco más livianos como si estuvieran preocupados por las clases trabajadoras o con los más necesitados. Mentiras con tarta.
Por eso la supervivencia en la vida, en las costas caribeñas, en los programas televisivos se va convirtiendo en un juego inocuo que no llama demasiado la atención. El descalabro constante de Tele 5 empieza a ser cosa de estudio, ya que ni los valores más seguros de su escudería como Jesús Vázquez logran mantener el tipo y en el programa de tarde, «Guerra de sesos», mediocre donde los haya, no levanta cabeza y seguramente irá, uno más, al olvido rápidamente. La verdad es que renuevan la parrilla, buscan lo seguro y les falla todo. Están en caída libre. Dentro de esta situación se dan circunstancias muy curiosas como que «Supervivientes» vaya bajando y el programa que le sigue, para hablar de lo sucedido en Honduras, suba, con lo que se invierte todo el ciclo, lo que interesa es la opinión de las acciones, o dicho de otro modo, lo que interesa es que nos cuenten intimidades que no se han ofrecido en directo.
Y también se deberá explicar a la luz de los análisis sociológicos de los comportamientos de las masas el éxito de esa serie tan horripilante que se llama «Águila roja». Intuyo que la gente se dedica a reírse con los millones de fallos en la realización, en la decoración y el vestuario. Es como asistir a un compendio de tomas falsas. Será este interés malsano por ver lo peor de la tele lo que le da unas cifras de audiencia de liderazgo. Atravesados.