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HIMALAYA Temporada en marcha

La pasarela ochomilista presenta su particular prêt-à-porter

Los ochomiles cuentan para esta primavera con un buen número de expediciones. Entre los retos más importantes destacan el intento del Pilar Oeste del Makalu en estilo alpino, la travesía Lhotse-Everest y posibles aperturas en la cara oeste del Annapurna y del Manaslu.

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Andoni ARABAOLAZA | DONOSTIA

La temporada del pre-monzón del Himalaya ya ha abierto sus puertas. Algunas expediciones ya se encuentran inmersas en sus proyectos; es decir, en la propia montaña. Otras, en cambio, acaban de dar sus primeros pasos en el proceso de aproximación. Y hay quienes todavía están en Katmandú cerrando papeleos y demás historias.

Como cada primavera, y en esta ocasión sólo hablaremos de los ochomiles, hay proyectos de todos los colores. Fuera de lo que llamaríamos el círculo clásico, esta temporada nos ofrece a priori retos de gran calidad, muy interesantes y de los que si se logran serían de gran aportación para la historia de los gigantes del Himalaya. Y, justamente, comenzamos esta crónica con estas últimas expediciones; una de ellas, además, lleva sello de ochomilistas vascos.

Y, porqué no, ponemos en línea de salida el proyecto que ya han emprendido Mikel Zabalza, Juan Vallejo y Alberto Iñurrategi. Este trío apuesta nada más y nada menos que por el Pilar Oeste del Makalu (8.463 m). Si lo presentamos así, algún lector bien informado dirá que este ochomil ya ha sido escalado por esta ruta. Y, sí, tiene toda la razón. Fue en octubre de 1991, y el protagonista Manu Badiola. Una gran ascensión para aquella época, y es que esta vía abierta en 1971, a parte de ser muy estética, es realmente difícil. Los Zabalza, Vallejo e Iñurrategi, en cambio, le quieren dar a esta escalada otra vuelta de tuerca; es decir, se ciñen en el cómo o estilo de ascensión.

Lo intentarán en estilo alpino, un estilo por el que ninguna expedición ha apostado hasta el día de hoy. Ahí radica la visión de esta expedición. Ya han transcurrido 38 años desde la apertura del Pilar Oeste y todavía no cuenta con ninguna escalada en alpino. La apuesta es valiente, pero al mismo tiempo muy difícil. Son nada más y nada menos que 3.000 metros de vía con importantes dificultades técnicas; sobre todo en el gran muro final. Mixto entre los 6.500 y 7.300 metros, y tramo de roca desde los 7.350 a los 7.700 metros. Y por allí, si no ha cambiado demasiado el escenario, se tendrán que enfrentar a largos de V+ y A2.

Uno de los protagonistas, Vallejo, ya conoce los intríngulis de esta vía, y es que hace 7 años lo intentó junto a otros tres ochomilistas vascos; se dieron la vuelta a 7.600 metros. Los expedicionarios se mostraban muy cautos a la hora de partir al Makalu: «Sabemos que es una empresa harto difícil y que tenemos pocas oportunidades de subirlo en el estilo que queremos, en el alpino. El mínimo fallo, y nos tendremos que dar media vuelta. Somos sólo tres, un equipo reducido, pero creemos que el idóneo para este tipo de ascensión. Primero aclimataremos en el Baruntse (7.129 m), y el ataque al Pilar Oeste será más o menos a mediados de mayo».

Empezábamos por los de casa, y seguimos con una expedición de Kazajistán. El Grupo Nacional Kazajo también ha presentado un reto de muchas estrellas: el encadenamiento del Lhotse (8.516 m) y el Everest (8.848 m). Ya lo planearon el año pasado, pero lo tuvieron que aplazar porque el Gobierno chino cerró la vertiente tibetana del Everest. Ahora, en cambio, están en camino a hacer algo que nadie ha logrado aún. Se trata de una travesía ideada por Anatoli Bukreev, Simone Moro y Denos Urubko. Y en esta ocasión lo intentarán Maxut Zhumayev, Vassil Pivtsov, Serguey Samoilov y Eugeny Shatov: cuatro grandes de la escuela kazaja.

Los expedicionarios tienen muy claro cuál es el recorrido, pero, cómo no, también hay muchas dudas por medio: «Subiremos al anfiteatro que forman el Everest, el Lhotse y el Nuptse, para luego seguir hacia la cumbre del Lhotse por la vía normal. De ahí, bajaremos por al collado Sur, y luego subiremos el Everest. Otros compañeros ayudarán en los puntos clave de esta travesía. Nosotros prevemos dos pasos claves: el descenso del Lhotse hacia el collado Sur y el descenso del Everest por la vía yugoslava-americana. De estas secciones de las montañas no hay información reciente».

Por otro lado, también destacamos otras expediciones por la forma que encaran sus retos. Valeri Babanov y Viktor Afanasiev, por ejemplo, intentarán escalar un nueva ruta en la cara oeste del Annapura (8.091 m) y en estilo alpino. En la impresionante cara sur de la misma montaña ya están trabajando los checos Martin Minarik y Dodo Kopold. Y, al parecer, junto a estos está la francesa Elisabeth Revol; la misma que el año pasado se llevó tres ochomiles del Karakorum.

Tampoco nos olvidamos de Piotr Morawski y Peter Hamor quienes intentarán abrir una nueva ruta en la oeste del Manaslu (8.163 m). O la expedición checa liderada por Libor Uher que tiene el siguiente propósito: el Couloir Hornbein y la arista Este del Annapurna.

Chicas en acción

A grandes rasgos, esos son los proyectos más interesantes de esta recién abierta temporada del Himalaya. Por decirlo de alguna forma, el otro «circuito» es el que más expediciones va a recibir. Y para empezar con esta lista, nos centraremos en las pretensiones que tienen las tres ochomilistas, Nives Meroi, Gerlinde Kaltenbrunner y Edurne Pasaban, que van a por la lista de los 14 ochomiles; las tres cuentan con 11.

Pasaban, por ejemplo, ha marchado al Kangcehnjunga (8.586 m), e irá acompañada por Asier Izagirre, Juanito Oiarzabal, Alex Txikon, Jorge Egocheaga y Ferrán Latorre. También habrá más presencia vasca en este majestuoso ochomil: Alberto Zerain, Koke Lasa, Julen Reketa y Patxi Goñi. En la misma expedición participarán Oscar Cadiach y Juanjo Garra.

La italiana Meroi también tenía intención de dirigirse al Kangchenjunga, pero, por algunos problemas que hay por aquella zona, puede que finalmente se decante por la sur del Annapurna que lo intentará junto a su compañero Romano Benet. Y la tercera en discordia, Kaltenbrunner, parece que ha apostado por dos ochomiles: el Lhotse y el Everest.

Un último apunte, el malestar que hay por el área del Kangchenjunga ha llevado al Manaslu (después, cómo no, del Everest) a ser el más popular o visitado en esta temporada.

PILAR OESTE

Alberto Iñurrategi, Juan Vallejo y Mikel Zabalza apuestan por una línea estética y difícil. Se trata del primer intento en estilo alpino del Pilar Oeste. Se tendrán que enfrentar, sobre todo en el muro final, con zonas técnicas de V+ y A2.

DURA TRAVESIA

El Grupo Kazajo Nacional intentará la travesía Lhotse-Everest, un encadenamiento que todavía no ha sido completado. Señalan que hay dos pasos claves: los descensos del Lhotse al collado Sur y del Everest por la vía yugoslava-americana.

NUEVAS RUTAS

Valeri Babanov y Viktor Afanasiev se decantan por una nueva línea en estilo alpino en la cara oeste del Annapurna. Mientras tanto, Piotr Morawski y Peter Hamor se inclinan por una apertura en la oeste del Manaslu.

LAS TRES CHICAS

Nives Meroi, Gerlinde Kaltenbrunner y Edurne Pasaban se enfrentan a su 11 ochomil. Meroi parece que irá al Annapurna, Kaltenbrunner apuesta por Everest y Lhotse, y Pasaban por el Kangchenjunga. Las tres quieren ser las primeras en terminar la lista de los 14.

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