Cuatro meses después de que la Audiencia de Bizkaia ordenase su ingreso voluntario en prisión, el que fue director del aeropuerto de Sondika de 1997 a 2001, Segismundo López-Santacruz, y su mujer, Laura Hernández, fueron arrestados el jueves pasado en la urbanización de lujo El Zaudin, en el municipio sevillano de Bormujos, cuando se dirigían a jugar a golf. Tras dos órdenes de ingreso voluntario y otras dos de búsqueda y captura -la última el 1 de abril- el directivo de Aena condenado fue detenido por la Guardia Civil.

Un jurado popular había declarado el 22 de junio de 2007 culpable a López-Santacruz de falsificación y malversación de caudales públicos por simular el arrendamiento de una vivienda, y falsificación, fraude y cohecho en la contratación de las obras de ampliación del aeropuerto vizcaino. La condena de nueve años y medio de prisión se fundamenta en que quedó probado que el ex director cobró alrededor de 948.000 euros de comisiones por los trabajos de construcción. Además, llegó a comprarse dos pisos de lujo en Getxo con el dinero que le pagaba mensualmente Aena para abonar el alquiler de su vivienda.

Este fallo es firme por sendas sentencias del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) y el Supremo español; la defensa ha recurrido al Constitucional. A la esposa, Laura Hernández, se le condenó en la misma causa a dos años de cárcel por aprovecharse de un dinero de procedencia ilícita, calificado de «un delito de receptación».

La prisión no es sólo a lo que fue condenado el ex director de Sondika y su mujer. Los dos imputados tienen que pagar más de cuatro millones de euros en multas, indemnizaciones y otras costas del prolongado proceso judicial.

En 2004, tres años antes de que tuviera lugar la vista oral en la Audiencia vizcaina, Aena ofreció a su ex directivo un acuerdo extrajudicial si estaba dispuesto a devolver 500.000 euros, que fue desechado por Segismundo López-Santacruz que propuso abonar cerca de 150.000 euros. Esa cantidad fue la estipulada en concepto de costas. Una semana antes del juicio, en junio de 2007, elevó la cifra a 240.000 euros, que fue desestimada por Aena.

La última resolución ante los recursos del ex director del aeródromo sondikarra llegó en diciembre de 2008 del Supremo español, que ratificó en firme la sentencia del TSJPV.

La causa principal contra López-Santacruz tiene aún sus derivaciones en dos pleitos que se tramitan en Getxo e Iruñea. En un juzgado de la localidad vizcaina se le ha procesado por «alzamiento de bienes», al no haber abonado una fianza de 481.000 euros en el caso principal mientras vendía una vivienda en Getxo por 1,3 millones de euros. Tres días después, según consta en el sumario, se escrituró a nombre de uno de sus hijos el chalé de Bormujos, en Sevilla.

La otra derivación se encuentra en otro juzgado de la capital navarra, relacionada con la falsificación de un documento de compraventa de un piso en Iruñea, con el que pretendía justificar ingresos de origen no aclarado.