Otra película que intenta explorar en la juventud de Lorca, Dalí y Buñuel, cuando los tres coincidieron en la madrileña Residencia de Estudiantes. A diferencia de la película de Carlos Saura «Buñuel y la Mesa del Rey Salomón», esta otra se centra más en la relación entre Federico García Lorca y Salvador Dalí, dejando a Luis Buñuel en un segundo plano. En su tercer largometraje, el inglés Paul Morrison quiere ir más allá de la homosexualidad que unió al poeta y al pintor, para investigar la mutua influencia que tuvieron en sus respectivas obras. En la mente del realizador no pudo haber ninguna intención de explotar la fama creciente del actor Robert Pattinson, que aparece caracterizado como el genio de Figueres luciendo ya el que iba a ser característico bigote, por la sencilla razón de que el rodaje de «Sin límites» fue anterior al de «Crepúsculo» y sus millonarios vampiros adolescentes.