Crónica | Agresión policial en Iruñea
«Si esto hubiera sido en EEUU, lo veríamos en los telediarios»
La joven de Berriozar Natalia Jiménez ya fue advertida en comisaría que era mejor que se lo pensara antes de denunciar a la Policía Foral. Pero decidió no pasar por alto la agresión que sufrió en una gasolinera, acreditada por los partes médicos. Su denuncia se cerró en pocos días y aho- ra se ha enterado de que es ella la acusada. El vídeo del hecho, por cierto, lo guarda el juez.
Ramón SOLA
«Si esto hubiera pasado en Estados Unidos o Francia, lo veríamos en los telediarios». La frase del edil de Berriozar Fermin Irigoien puso el dedo en la llaga. Pero la gasolinera Discosa no está en Arkansas, sino en Iruñea, y la maquinaria policial y judicial parece estar mejor engrasada en tierras vascas para que este tipo de hechos no trasciendan a la opinión pública. El vídeo, de hecho, está en manos del juez, que ha determinado que la denuncia de Natalia Jiménez debe cerrarse porque no es posible identificar a ningún agresor.
Rebobinemos. Madrugada de Jueves Santo. Jiménez regresa de Iruñea a Berriozar y entra en la gasolinera con su compañero. Allí hay dos agentes de la Policía Foral. Aparentemente, se produce un malentendido, ya que uno de ellos le pregunta a Natalia: «¿Qué, te doy asco?». El cruce de palabras deriva en cacheo, el cacheo en agresión, y la agresión en detención, según la denuncia. Jiménez añade que en el traslado a comisaría los forales le dirigen frases como «Puta batasuna, hija de andaluces». Que alguien pone el himno español en su móvil y comenta que «se me pone dura al oír esto».
Partes médicos en el Juzgado
Denuncias como éstas son frecuentes, pero lo difícil es que se hayan podido lograr pruebas. Pero este caso es diferente: el médico que atiende a la joven envía el parte médico al juzgado, y otro más a los pocos días.
Natalia Jiménez aporta el nombre y apellidos del agente, ya que lo conoce del instituto. Hay testigos. Y está el vídeo de las cámaras de la gasolinera. «¿Qué más necesita un juez para abrir una investigación?», preguntó ayer Irigoien, para quien el caso evidencia «la impunidad, el odio a todo lo vasco y el militarismo» de la Unidad Móvil de Intervención de la Policía Foral. La izquierda abertzale llevará el caso al Ayuntamiento con una moción el 27 de mayo, y realizará una concentración el día 14.
Jiménez añadió otro dato revelador. Nada más salir de comisaría aquella madrugada, pasó primero por el ambulatorio y luego acudió a la Policía Municipal de Iruñea a interponer la denuncia por una agresión que no comprendía: «Cuando les dije el nombre del foral les cambió la cara, porque le conocían. Me dijeron `igual es mejor que descanses, no hay prisa, tienes seis meses para denunciar'». Pero se negó, y ahora ha pasado de denunciante a denunciada.
