Armstrong encabezó al equipo de Leipheimer, que sacó medio minuto a la mayoría de favoritos
Sólo los poderosos Columbia y Garmin superan al Astana
Los dos especialistas en la crono por equipos no defraudaron y Mark Cavendish es el primer líder del Giro.
El Columbia High Road se impuso ayer en la primera etapa contrarreloj por equipos del Giro del Centenario y Mark Cavendish vistió la maglia rosa al pasar la línea de meta en cabeza de su equipo, que llegó al completo. El Garmin, ganador en 2008, se tuvo que conformar con la segunda plaza a seis segundos y Astana se quedó a trece de dos equipos plagados de especialistas en la contrarreloj.
Lance Armstrong cruzó la línea de meta como primer corredor del Astana y acaparó el protagonismo en una etapa en la que lucía un casco negro diferente al del resto de sus compañeros, con el que promocionaba la Fundación Livestrong que él impulsa para luchar contra el cáncer. Demostró con sus buenos relevos que mantiene la gran fuerza en sus piernas para destacar en la lucha individual, pero a partir del martes se verá su nivel en la montaña.
Aunque corredores de grandes vueltas como Rogers y Vandevelde quedaron por delante, Astana consiguió distanciar a todos los favoritos a los puestos de honor. El que estuvo mejor de lo esperado fue el LPR de Di Luca, que apenas cedió nueve segundos con un equipo como el de Leipheimer con muchos especialistas en la lucha individual. El resto de equipos estuvo muy igualado; apenas unos segundos separaron a los conjuntos de Menchov, Basso, Cunego o Sastre y la mayor decepción llegó con el Saxo Bank de Cancellara y Voigt, decimotercero.
Etapa propicia para el sprint
Por ello el Columbia, que fue el único que llegó con sus nueve corredores juntos, colocó de líder a Cavendish, al que querrá lanzar a la victoria en la segunda etapa de hoy entre Jesolo y Trieste (156 kilómetros), una de las pocas opciones para los sprints que presenta este Giro.
El equipo Quick Step hizo público ayer un comunicado en el que anuncia que «Tom Boonen ha sido suspendido de toda actividad competitiva de forma inmediata y el staff trabaja con los sponsors del equipo y quiere analizar la situación durante este fin de semana antes de anunciar una posible futura acción». Este anuncio llega tras saber que el líder del equipo ha vuelto a dar positivo por cocaína tras un control efectuado entre el 24 y el 25 de abril, unos diez días después de su triunfo en la clásica París-Roubaix, según anunció el tribunal de Turnhout, que registró ayer su casa. El consumo de esta droga fue detectado en un análisis de orina de la Comunidad Flamenca fuera de competición oficial, por lo que no es castigable en el ámbito deportivo, aunque sí podría tener graves consecuencias para Boonen en el terreno legal y es posible que el sponsor Quick Step decida despedirlo.
El corredor se encuentra «abatido» tras conocer los resultados de este análisis, según señaló su abogado, Luc Deleu, en la cadena de televisión flamenca VRT, al tiempo que recalcó que se trata de un caso semejante al protagonizado hace aproximadamente un año, cuando Boonen también dio positivo por cocaína en un control fuera de competición. «Pero humanamente, el problema es mucho más grande. La imagen de Tom está de nuevo empañada y vuelve a correr el riesgo de no poder participar en el Tour», afirmó Delou.
El pasado mes de febrero, el tribunal belga de Turnhout decidió la suspensión de la pena por consumo y posesión de cocaína de Tom Boonen bajo ciertas condiciones, que incluían que no volviese a consumir drogas y mantuviera contactos con un funcionario judicial. El flamenco no fue sancionado por la UCI, aunque el Tour y la Vuelta a Suiza le impidieron participar en sus carreras.
GARA
