Despiden a Yasmín, mientras que en la calle se denuncia su muerte
Cientos de personas salieron ayer a la calle para denunciar la muerte de Yasmín Zamira Rodríguez, exigir medidas efectivas para poner fin a la violencia contra las mujeres e insistir en la necesidad de que la sociedad se sensibilice con este problema. Al tiempo que se despedía a la vecina de Irun en un emotivo funeral, su ex pareja y presunto autor de su muerte ingresó en la prisión de Martutene tras pasar ante el juez.GARA |
Las calles y plazas de numerosas localidades se convirtieron ayer en testigos de la conmoción y la repulsa que ha provocado la muerte de la irundarra Yasmín Zamira Rodríguez.
La mujer, fallecida el sábado a consecuencia de los navajazos que presuntamente le asestó su ex pareja, fue despedida en el funeral que se celebró en la parroquia de Nuestra Señora del Juncal.
Mientras, su ex compañero, Enrique San Clemente, ingresó ayer a primera hora de la tarde en la cárcel de Martutene. El titular del juzgado de guardia de Irun decretó su ingreso en prisión sin fianza después de que a media mañana fuera puesto por la Ertzaintza a disposición judicial, según informó el Departamento de Interior de Lakua.
En las concentraciones que se llevaron a cabo ayer tarde a lo largo y ancho del país, además de denunciar esta nueva muerte -quinta víctima mortal de la violencia sexista en lo que va de año-, se instó a las instituciones a que tomen medidas eficaces y urgentes para dar fin a la violencia ejercida contra las mujeres.
Así, en Donostia por ejemplo las participantes, que portaban una pancarta en la que se podía leer «Indarkeria sexistari aurre egin, matxismoak hiltzen gaitu», denunciaron esta nueva muerte y recordaron la necesidad de que la sociedad se sensibilice ante esta «lacra». Además de en Donostia, convocadas por la Plataforma de la Marcha Mundial de Mujeres, se celebraron concentraciones en Gasteiz (60), Tolosa (30), Errenteria (110), Zarautz (50), Azpeitia (50), Arrasate (55), Lasarte-Oria (25), Iruñea (50), Bilbo (60) y Algorta (20).
Tal y como recordó Bilgune Feminista, es preciso cambiar de raíz este «sistema que mantiene las relaciones jerárquicas entre personas de diferentes sexos». A su entender, mientras tanto, «las mujeres seguirán siendo ciudadanas de segunda». Ese cambio corresponde, en opinión de Bilgune Feminista, tanto a las instituciones como a la ciudadanía. «No nos podemos quedar esperando, tenemos que apostar por la autodefensa feminista», reivindicaron.
Asimismo, con el objeto de mostrar su rechazo ante esta muerte y su solidaridad con los familiares de la víctima, alumnos y profesores del Instituto Pío Baroja de Irun, en el que estudia Angie, la hija de Yasmín, realizaron una concentración en el centro escolar.
Por otro lado, Juan Pablo Urtizberea, el hombre herido al auxiliar a la víctima, fue ingresado ayer en planta con pronóstico reservado. Según informaron fuentes de Osakidetza, Urtizberea, de 49 años, abandonó la UCI del Hospital Comarcal del Bidasoa donde ingresó en la madrugada del sábado tras recibir heridas de arma blanca en el abdomen por parte del presunto autor de la muerte de Yasmín Zamira, de las que fue intervenido. La presidenta del Parlamento de Gasteiz, Arantza Quiroga, visitó ayer al herido y alabó su «heroísmo». Mientras tanto el alcalde de Irun, José Antonio Santano, anunció su intención de entregarle a este vecino la Medalla al Mérito Ciudadano.
El Ayuntamiento de Mallabia ha convocado una concentración hoy a las 19.30 para denunciar la agresión sufrida por una de sus vecinas a manos de su pareja. La protesta se llevará a cabo junto al frontón.
Cuando se cumplen siete meses de la desaparición de la mujer de Lizarra, sus familiares y vecinos se concentraron para denunciar su caso y exigir que se esfuercen en su búsqueda.