«Con este virus se ha confundido alerta sanitaria con alarmismo»
Este profesor e investigador madrileño (1949) es uno de los principales referentes de la apuesta científica vasca. Su currículum atesora un buen número de premios e invitaciones de prestigiosas universidades. Pero por encima de todo es un enorme divulgador y un científico con las ideas muy claras. Como con la explosión mediática e informativa en torno al nuevo virus de gripe A.
Joseba VIVANCO
Un virus nuevo siempre dispara todas las alarmas... ¿Justificadas?
Lo primero que hay que saber es que la gripe estacional de cada año ha evolucionado a partir de la gripe de epidemias como las de 1918 y 1968, virus que aparecieron, que se establecieron y siguen mutando. Es decir, que la gripe aparecida ahora en México no es nada nuevo. Lo que ha ocurrido era de esperar, tarde o temprano tenía que pasar. Es verdad que sabemos poco de esta infección, pero toda su trayectoria ha sido la previsible. No sabemos del todo su nivel de infección, su nivel de mortalidad, aunque da la sensación de que se cura como cualquier otra gripe y es poco contagiosa. El vasco ingresado en Cruces no infectó al resto del avión... Parece un virus con el que podemos lidiar.
¿Alerta o alarma? ¿Cómo se han comportado los medios?
La OMS se ha comportado correctamente, porque ha aparecido un nuevo virus y su obligación es seguirlo. Pero la palabra alarma no significa lo mismo para la OMS que para mí. Es decir, miles de seguidores del Athletic han ido a Valencia por carretera y lo que hace la Policía es ponerse en alerta, pero para que nosotros conduzcamos tranquilos. Trato de decir que la OMS da una alarma pero para que estemos tranquilos. Pero lo que ha ocurrido es que, de repente, la mayoría de medios de comunicación han sido apocalípticos. Han confundido la alerta sanitaria, que es sólo un protocolo, con una alarma social. Y prueba de ello es que el virus sigue por ahí, pero ya no ves noticias sobre él.
¿Se corre el riesgo, entre la sociedad, de caer en una especie de desconfianza ante estas alertas sanitarias?
Se corre totalmente ese riesgo. Venía SARS y no llega, la gripe aviaria y no llega, la nueva y no llega... y cuando venga otra dirán que ya están con lo mismo. Sucedió como con los priones de las vacas locas, cuando la probabilidad de que me pille un coche era muy superior a que yo me muriera por un prión. Lo peligroso es que la sociedad empiece a desconfiar no ya de los medios de comunicación, sino de la ciencia y de los científicos, y eso es muy malo. Yo creo que, en general, ha sido un poco triste cómo se ha abordado desde los medios. ¿Por qué si antes era tan importante, ahora ya no lo es, cuando sanitariamente sigue el nivel 5 de alerta?
Es cierto que se ha hablado mucho de lo que podría ocurrir, pero poco de que, lo mismo que con la gripe aviaria, los sistemas sanitarios han vuelto a funcionar. Aquella gripe del pollo no se esfumó, se controló. Ahora también ha sucedido.
Efectivamente. Una epidemia que comienza en México, donde no hay un sistema sanitario maraviolloso, es detectada con rapidez y en cuando saltan las alarmas se detectan casos en España, Australia, China... Si una infección de este tipo hubiera ocurrido en los años 50 del siglo pasado, ni nos habríamos enterado. Es decir, que el sistema sanitario internacional ha funcionado muy bien, se ha sabido qué era, cómo era, se han probado los antivirales... Insisto, se ha respondido muy bien y en eso habría que hacer hincapié, pero se oye poco. Y sigue habiendo peligro de una pandemia grave en un futuro, pero tranquiliza que estemos más preparados que nunca. Es más, yo estoy más tranquilo ahora que hace un año, porque he visto que la vigilancia funciona. El único problema, insisto, es que los medios de comunicación lo han sobrevendido.
También es cierto que se habla mucho de mejorar esos sistemas de prevención y alerta, pero nada de por qué surgen virus como éstos cada vez más peligrosos. ¿No se están poniendo parches?
Se ha puesto en clara evidencia con la crisis actual que para que no haya paro hay que crecer un 3% anual. Y deberíamos estar contentos de que se fabriquen menos coches y se consuma menos gasolina, de que se construyan menos casas, se contamine menos... pero eso origina paro. Es decir, que tenemos que consumir y consumir para vivir como nos hemos acostumbrado. Y, entonces, arraso y me llevo la costa por delante o los recursos naturales, o cualquier método es adecuado para producir mucha carne. Pero la realidad es que no vale todo. Fíjese, en cierto país europeo, a sus granjas de patos les dieron un antiviral antiguo y barato como método de prevención. ¿Qué ha ocurrido? Que los virus se han hecho resistentes y ahora tenemos por ahí una cepa que se ha hecho resistente a ese antiviral. Y no vale todo. No nos importa cómo crían a los pollos si su carne es barata. Y solemos tener la costumbre de revisar las cosas cuando hay un problema de salud. Pero no podemos ir siempre por detrás de los acontecimientos. Tratemos de poner las cosas en orden para evitar epidemias.
«Que la sociedad piense que otra vez han fallado es malo, porque pueden desconfiar, no de los medios de comunicación, sino de los científicos y de la ciencia»
«Yo estoy más tranquilo que hace un año, después de ver que los sistemas sanitarios han funcionado. Estamos mejor preparados que nunca»