El italiano Michele Scarponi, del Serramenti Diquigiovanni, obtuvo una meritoria victoria en solitario en la sexta etapa del Giro, disputada entre Bressanone y Mayrhofen (Austria), de 248 kilómetros, en la que su compatriota Danilo Di Luca (LPR) logró mantener la maglia rosa de líder.

Scarponi, de 29 años y ga- nador esta temporada de la general de la Tirreno-Adriático y de una etapa en esta misma prueba, hizo un despliegue de fuerza y coraje al aguantar una fuga que compartió desde el kilómetro 50 con otros cuatro corredores -Guillaume Bonnafond (AG2R), Vasil Kiryienka (Caisse d'Epargne), Oscar Gatto (ISD), y Kasper Klostergard (Saxo Bank)-, a los que fue eliminando hasta hacer en solitario los últimos 10 kilómetros ante la presión de un pelotón que no pudo darle alcance para disputar la victoria al sprint.

El ciclista italiano necesitó 193 kilómetros de escapada para firmar su primera victoria en el Giro. Llegó en solitario, con tiempo para disfrutar de su éxito. Por detrás, el grupo principal erró en sus cálculos y se vio impotente para neutralizarlo, llegando a meta con una desventaja de 32 segundos.

El noruego Boasson Hagen (Columbia) y el australiano afincado en Oiartzun Allan Davis (Quick Step) encabezaron al pelotón. Lance Armstrong volvió a perder tiempo -entró a 1.20 del ganador-, en otra jornada en la que el estadounidense dio muestras de su escaso estado de forma.

Entre los favoritos no se produjeron cambios significativos. Fue una jornada de transición -larguísima en cuanto a su kilometraje, eso sí- después de las dos primeras etapas de montaña, en las que se produjo la primera selección entre los candidatos al triunfo final.

La de ayer es la decimotercera victoria de Scarponi -todas ellas logradas en carreras italianas, aunque la de ayer fue en territorio de Austria-, desde su debut profesional en 2002. Un premio a la valentía, que, en esta ocasión, fue rentable.