El derrotado candidato presidencial iraní Mir-Hussein Musavi consideró ayer «ilegítimo» al nuevo Gobierno del presidente Mahmud Ahmadineyad al tiempo que defendió, mediante un co- municado difundido en su página de internet, que continúen las protestas.

«Es nuestra responsabilidad histórica continuar con nuestras protestas y no abandonar nuestros esfuerzos para preservar los derechos de la nación», declaró Musavi dos días después de que el Consejo de Guardianes confirmara la victoria de Ahmadineyad.

Musavi, que reiteró que las elecciones presidenciales del 12 de junio fueron manipuladas, agregó que se unirá a una planeada «asociación de figuras prominentes del país que defenderá los derechos del pueblo».

Dudas en el seno de la UE

Mientras, los estados de la UE examinan una propuesta británica para proceder a llamar conjuntamente a sus embajadores en Teherán, pero varios socios dudan ante «el temor de reforzar a los más duros del régimen», según informó France Presse.

La idea de Londres consiste en realizar un llamamiento a consultas temporal conjunto como señal de protesta por la detención de cinco trabajadores iraníes en la legación británica, según una fuente diplomática europea. Uno de los empleados continúa arrestado, según Press TV.

Sin embargo, no se ha alcanzado ningún acuerdo entre los 27 para adoptar este medida.

El principio de una reacción europea colectiva fue uno de los asuntos que los ministros de Exteriores de la UE analizaron el pasado fin de semana durante un receso de una reunión de la OSCE en Corfú. En cualquier caso, la iniciativa no pasó de ser un mero boceto.

Está previsto que responsables políticos de los ministerios de Exteriores se reúnan hoy y mañana en Estocolmo para tratar esta cuestión.