ELA apuesta por trabajar con LAB al margen de la mesa de López
Al día siguiente de que Patxi López constituyera la Mesa de Diálogo Social con CCOO, UGT y Confebask, el secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, abogó por trabajar conjuntamente con LAB y con otros agentes sociales y sindicales en las empresas y en la sociedad. Muñoz insistió en sus críticas a la iniciativa del lehendakari, que sigue, en su opinión, el modelo de diálogo social impuesto en Nafarroa y en el Estado.
GARA
El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, Txiki, anunció ayer que esta central «buscará alianzas» con LAB y con otros organismos sociales y sindicales para «trabajar en las empresas y en la sociedad» al margen de la Mesa de Diálogo Social impulsada por el lehendakari, Patxi López, cuya utilidad ha cuestionado desde el inicio la mayoría sindical vasca.
En una comparecencia celebrada en Donostia antes de intervenir en un curso de la Fundación Manu Robles-Arangiz y la UNED de Bergara sobre «crisis y sindicalismo», Muñoz valoró que «sin lucha social» el proceso de diálogo que pretende desarrollar López, cuyo primer capítulo se escribió el jueves, «es un teatro vacío». A su juicio, el sindicalismo «no puede ser cómplice» de los participantes en ese foro, ya que «la concepción democrática» del Gobierno de Lakua peca de una «falta de respeto hacia los ciudadanos».
En este sentido, el máximo responsable de ELA sostuvo que los componentes de la mesa de diálogo -la patronal, Confebask, y los sindicatos CCOO y UGT, además del propio Ejecutivo autonómico- no quieren cambiar la política económica y fiscal, que consideró «fracasada», sino «ajustarla» a la situación actual.
«Diálogo social piramidal»
Muñoz apuntó también que «quienes pagan los impuestos» asumirán el coste de los 1.700 millones de euros de endeudamiento previsto por el consejero de Economía, Carlos Aguirre, quien también ha anunciado su intención de reducir en un 5% el presupuesto.
Volviendo al diálogo social, se refirió a lo ocurrido en Nafarroa y en el Estado, donde ese diálogo ha sido «compañero de viaje de las políticas laborales fracasadas» que han provocado «saqueo público, privatizaciones y un deterioro del empleo».
En su opinión, los participantes en la iniciativa liderada por López pretenden construir un «diálogo social piramidal» en el que no tienen cabida quienes no lo legitimen -el lehendakari fijó el jueves condiciones a la participación de ELA y LAB-, y destacó que Lakua no tiene competencias para hacer políticas «de verdad» dado que «es una subdelegación del Gobierno» español que no tiene política laboral ni puede hacer nada con la banca ni con las cajas.
Adolfo Muñoz manifestó que el Gobierno de Lakua «no tiene competencias para hacer políticas de verdad» dado que, a su juicio, «es una subdelegación» del Gobierno español que no tiene política laboral propia.
La imagen de entendimiento que los máximos responsables de CCOO y UGT y de la patronal mostraron el jueves tras la reunión de la Mesa de Diálogo Social auspiciada por Patxi López, en la que llegaron a consensuar una declaración conjunta, resulta chocante con lo ocurrido ese mismo día en Madrid, donde los representantes de estos dos sindicatos tuvieron un fuerte encontronazo con la CEOE.
Ayer, en declaraciones a la agencia Efe, el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, y el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, censuraron que la patronal acudiera a la reunión en el Ministerio de Trabajo reivindicando su programa de máximos, y calificaron de «difícilmente explicable» el «viraje» dado por la CEOE, que habría planteado cuestiones como la rebaja de las cotizaciones sociales en cinco puntos o lo que denomina «contrato del siglo XXI», que contempla la indemnización por despido con 20 días por año trabajado. Incluso, Lezcano pidió Zapatero que «reconduzca» el diálogo social.GARA
