Joselillo logró cortar una oreja en la corrida de ayer, aunque no supo culminar la faena en su segundo, dejando marchar así el ansiado triunfo en la Monumental iruindarra. Una verdadera pena. Entró muy mermado al sexto, que lo volteó de manera severa. Oreja y fuerte ovación tras dos avisos.

Fue una tarde marcada por las volteretas propinadas por los morlacos. También David Mora recibió otro golpe violentísimo en el segundo y perdió el premio con los aceros. El diestro fue completamente arrollado por el morlaco cuando trataba de saludarlo a porta gayola. El animal salió como un obús y en el momento del embroque golpeó violentamente con los cuartos traseros en la cabeza del torero, que incluso llegó a impactar contra el suelo y quedó sensiblemente conmocionado durante el resto de la lidia. Destacó el toro por su duración y el modo de embestir al capote, lo que aprovechó el torero en varias fases. Silencio tras aviso.

Al quinto lo manejó con el capote, pero volvió a emplear mal la espada, por lo que se tuvo que conformar con una ovación recibida desde el callejón.

«Me conformo con haber gustado a los aficionados», declaró Mora, que reconoció haber perdido la noción del tiempo debido el golpe propinado por el toro, pero que estaba decidido a acabar con la lidia pasase lo que pasase.

Serafín Marín saludó con buenas formas al que abrió plaza para después no terminar de confiarse muleta en mano con un toro que se movió aunque tendió a meterse por dentro. Al cuarto lo castigó severamente en varas y llegó muy parado al último tercio. Silencio y silencio tras aviso.