El vecino occidental no había tenido hasta la fecha buenas relaciones con los representantes institucionales de la CAV. «No porque ellos no quisiesen, sino porque no quise yo, ya que no se daban las condiciones que ahora sí se dan», se había jactado Revilla. Y, en consonancia, el lenguaraz presidente cántabro -pese a esa simpatía de agente de ventas que luce- tampoco cae bien entre la ciudadanía abertzale. En más de un Alderdi Eguna le han dedicado incisivas pegatinas.

Pero ahora todo ha cambiado. La llegada del unionismo a Ajuria Enea hará posible que hasta pueda acabar viéndose ETB1 en la TDT cántabra. Ése es uno de los puntos del acuerdo firmado ayer. Y es que Revilla está satisfecho de que «el cambio político en el País Vasco está encauzado».

El actual presidente cántabro estudió Económicas en Bilbo y en sus años universitarios fue compañero y amigo de Txabi Etxebarrieta. Así lo cuenta él. Es evidente que no se le pegó nada. Político populista, no es, sin embargo, el más votado de Cantabria. Gobierna gracias a un pacto con el PSOE, que le permite superar en escaños al PP, que es, de lejos, la primera fuerza.

Al menos de cara al exterior, lo más conocido de Revilla no es su buen hacer como gobernante, sino su costumbre de regalar latas de anchoas a sus visitantes y a sus anfitriones. Así que también Patxi López tuvo ayer su lata, como la recibió el día de su toma de posesión como lehendakari en Gernika. Además, en la cesta de productos típicos incluyó queso, vino y una reproducción del Beato de Liébana. Desde Ajuria Enea le llevaron una lámina del Dolmen de Sorginetxe y otra cesta con txakoli y vino de Rioja alavesa, alubias, pimientos de Gernika, queso de Idiazabal y tejas y cigarrillos.

«Eres imprescindible»

Pero Miguel Angel Revilla no sólo regaló el paladar de Patxi López, sino también sus oídos. Hizo un homenaje público al lehendakari y a «tantos patxis lópez que en Euskadi defienden la Constitución, defienden Euskadi y defienden España». «Cuídate, Patxi, eres imprescindible», le piropeó antes de incidir en que «él y todos los patxis son unos héroes». El lehendakari respondió con un «los vascos no van a ceder al terror».

En el encuentro -que se celebró en la localidad de Comillas-, los gobiernos de Cantabria y la CAV firmaron un «pacto de vecindad» en diversas materias para lo que pomposamente definieron como «un espacio económico común». Entre las prioridad establecidas figuran que Santander y Bilbo estén unidas por TAV para 2015. Revilla aseguró que cuenta con el compromiso de Fomento para que en esa fecha el tiempo de trayecto entre ambas ciudades sea de apenas 20 minutos. Teniendo en cuenta que el proyecto no es, de momento, más que una raya en un mapa sobre el que no se ha hecho ningún estudio concluyente, muchas anchoas tendrá que llevar Revilla a Madrid para que le terminen la obra en ese plazo.

Pero ayer todo era buen rollo. Abrazos por aquí y por allá. Es más. Seguro que desde que gobierna López ni el Athletic le parece xenófobo y hasta las traineras vascas reman mejor.