La jornada de clausura de los Campeonatos de España trajo tres nuevos metales para la participación vasca, aunque sin ningún oro que añadir al de Naroa Agirre. Los navarros tuvieron una tarde de bronce. Fue Tania Sola, del Pamplona Atlético, la primera medalla vasca de la jornada, al obtener un bronce en la final de martillo femenino, con un lanzamiento de 53,20 metros. La vizcaina Iratxe Olazabal no pudo pasar del quinto puesto. Muy lejos en cualquier caso de los 66 metros que lanzó el martillo la campeona, la valenciana Berta Castells.

La segunda medalla se la colgaba otro habitual en el podio en este certamen. En 400 metros vallas, José María Romera (Vayavalla) se clasificaba en la tercera plaza (51.45), tras acceder a la final con el mejor registro. Por su parte, Larraitz Bergara (Atlético SS) no lograba hacer lo propio en la final femenina, llegando en quinta posición.

Velocistas navarros

La tercera navarra de bronce fue Vicky Villanueva. La velocista del Scania se encaramó al tercer peldaño del podio en los 200 metros (24.90), mientras Javier Sanz (Ardoi), campeón el pasado año, no pudo defender su título y se quedó fuera del podio en quinta posición (21.62). En ese mismo puesto se clasificó Marta Peña (Atlético SS) con 25.07.

Otro de los que se quedó sin medalla, pero a sabiendas de que lo tendría difícil, era el guipuzcoano Mikel Odriozola, quinto en la final de diez kilómetros marcha. Su distancia está en los 50 y la prueba de ayer le valdrá de test para los Mundiales de Berlín, donde aspira a estar en la parte alta, pero ayer se quedó a más de un minuto del vencedor de la prueba, Juan Manuel Molina. Este aprovechó la descalificación de Paquillo Fernández, que sufrió la segunda exclusión de su vida cuando había cubierto ocho kilómetros. La asturiana Irene Alfonso, en las filas del Santutxu, se colgó la plata en 800 metros.