E l pasado sábado fallecía a los 87 años uno de los raros intelectuales de su época que unió pensamiento con compromiso. Filósofo de formación y discípulo de Jean-Paul Sartre, Jeanson no concebía las ideas sin la acción.

Así, desde muy joven se alistó en las Fuerzas francesas Libres, lo que le valió meses de cárcel en el Estado español. Tras el armisticio, comenzó a escribir y fue uno de los pilares de la revista de debate político «Les temps modernes», fundada por Sartre.

En 1948, con motivo de una serie de conferencias se trasladó a Argelia, donde descubrió una situación que se le hizo insoportable. A partir de en- tonces se comprometió en una lucha que le llevó a crear la red de «porteadores de maletas» de apoyo al FLN e, incluso, a acoger militantes en su casa.

Condenado a 10 años de cárcel vivió en el exilio hasta su posterior indulto en 1966. A su regreso, se centró en la puesta en práctica de la teoría del acceso público a la cultura. Dedicado en la útima etapa de su vida a romper las prácticas dogmáticas en psiquiatría, fue impulsor del debate para tratar ese tipo de enfermedades fuera del hospital.

Activo hasta su muerte, era presidente de la asociación Sarajevo desde 1992. Escribió una veintena de obras en total.