Los vecinos de Meatzea no cogen vacaciones en su lucha por que la refinería de Petronor respete la ley. Por ello, hoy al mediodía volverán a marchar por la playa de La Arena y animarán a los bañistas a que se sumen a la movilización en defensa del arenal una vez que la compañía que preside Josu Jon Imaz «sigue creciendo rellenando con más tanques, hornos y chimeneas» sus alrededores.

De ahí, su rechazo a la planta que transformará los residuos más pesados del petróleo en coque, que será transportado en camiones hacia el puerto a través del vial que comunica con la playa. «Nos traerá más ruido, contaminación atmosférica, vertidos de hidrocarburos al río y al mar en Punta Lucero, más polvo y riesgo de accidentes de tráfico al incrementar la circulación de camiones», argumentan desde la plataforma ciudadana.

«Muchas personas van y vienen de la playa andando o en bicicleta por un bidegorri que circula junto a la malla de la refinería. Petronor misma -resaltan- cataloga este punto como el de mayor concentración de contaminantes. Hacer esfuerzos significa respirar más, hay días en los que te sientes ahogar o tienes ganas de vomitar. El tráfico pesado empeora la situación y cualquier día podemos tener un accidente».

Además, los vecinos quieren garantías para su salud y seguridad, una vez que las cientos de denuncias que llevan formulando ante diferentes administraciones públicas por ruidos, olores, polvo blanco -por ejemplo- no han sido respondidas.

No ocultan que el desmantelamiento de los tanques de CLH y la reconstrucción de las dunas ayudan a mejorar el entorno de La Arena, pero las sucesivas ampliaciones de la refinería van en dirección contraria.

El 14 de julio, a la tarde, se produjo el último incidente en el complejo petroquímico en el que se originó una densa humareda negra, aderezada por las llamaradas que salían de un «mechero» cercano a la A-8, que alarmó a los vecinos de Muskiz y a los bañistas.

Al margen de la actividad de Petronor, el plan del Ministerio español de Medio Ambiente para recuperar las marismas que ocuparon durante tres décadas los depósitos de CLH se activará en los próximos meses. A mediados de setiembre, la actividad del restaurante Itxas Gane deberá cesar tras un auto del Tribunal de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Bilbo que atiende un requerimiento de Costas de 2005 que ordenaba el cierre del establecimiento.