
Cobard�a
La miseria moral, la catadura de un r�gimen y de quienes lo sostienen, se mide tambi�n por el trato que dispensa a los m�s indefensos. Ahora han apaleado a otro preso pol�tico vasco. Aitor Fresnedo no es, ni mucho menos, el primero, pero cuando algunos despliegan discursos trufados de democracia, �tica y moralidad, sepan qu� r�gimen sostienen. Apalear a un preso, adem�s de una cobard�a, es un retrato.
OLASO