Fuego a quince kilómetros de Atenas
La historia se repite. Dos años después, las llamas volvían a lamer la periferia de la Atenas eterna. Miles de vecinos de los pueblos afectados por las llamas han sido evacuados, así como varios hospitales, campamentos de verano y monasterios. Alcaldes y oposición comunista denuncian que se trata de incendios premeditados y financiados por la especulación. ¿Servirá esta vez para algo? Los gobernantes griegos son eternos hasta en la inacción. O en la connivencia.GARA |
Los incendios que asolan los alrededores de la capital gruega continuaban sin control, azuzados por los fuertes vientos, mientras los bomberos y los vecinos de las zonas afectadas se preparaban para una tercera noche de pesadilla.
El viento continuaba soplando a unos 60 kilómetros por hora, lo que contribuía a mantener activos diversos focos que han consumido miles de hectáreas de bosques, casas, bodegas y coches en los entornos del monte Pendelis, a unos 15 kilómetros del centro de Atenas.
Unas 10.000 personas de los pueblos cercanos a las llamas fueron evacuadas ayer debido al alto riesgo de morir calcinadas, aunque inicialmente se resistieron a abandonar sus bienes a merced del fuego.
Durante la jornada se vivieron escenas de auténtico terror en los patios de las viviendas construidas en las faldas del monte Pendelis y en zonas boscosas cercanas, con los inquilinos pidiendo a gritos que llegara ayuda para salvar sus propiedades.
Hospitales y monasterios
Los bomberos evacuaron en la noche del sábado dos hospitales pediátricos, uno militar, una clínica siquiátrica, varios campamentos infantiles de verano y diversos monasterios, mientras la Policía limita como puede el acceso a los frentes de los incendios. El Gobierno instó a los atenienses que tenían previsto regresar a la capital por carretera que se abstengan de hacerlo «por su propia seguridad», dada la cercanía del fuego.
Los hospitales locales continuaban recibiendo a decenas de ciudadanos afectados por complicaciones respiratorias debido al humo y las cenizas, transportadas por el viento, que cubren el cielo de la capital.
Las conexiones por tren también han quedado interrumpidas desde el norte, a unos 20 kilómetros de la entrada a Atenas.
Dos partidos de fútbol del campeonato griego, el Olympiacos-AEK y Panionios-PAOK, a celebrarse en Atenas, fueron aplazados a última hora.
Duras críticas
El presidente heleno, el conservador Carolos Papulias, ha suspendido sus vacaciones, mientras que el jefe de la oposición socialdemócrata, Giorgos Papandreu visitó los lugares afectados y pidió «acciones para aliviar a los afectados".
El Partido Comunista griego (KKE) atribuyó los incendios a una «acción intencionada que reforzada por la política anti-ecológica de los últimos años». La Justicia ha abierto un investigación, puesto que las autoridades locales denuncian que se trata de «acciones intencionadas» guiadas por el propósito de edificar en las zonas arrasadas.
El partido ultraderechista LAOS denunció el «vacío existente en la coordinación del trabajo de extinción», sumando su voz a las denuncias locales, que se quejan de la falta de efectividad en la lucha contra el fuego.
Los alrededores de Atenas vuelven a ser pasto de las llamas tras el verano de 2007, cuando se calcinaron unas 2.500 hectáreas de los montes de la capital. 65 personas murieron a causa del fuego, que profundizó en la grave crisis política, social y económica que vive Grecia.
Los responsables locales y el Partido Comunista Griego coinciden en denunciar que se trata de incendios intencionados para luego lucrarse edificando en las zonas arrasadas