El presidente de la Federación de Cofradías de Bizkaia, Iñaki Zabaleta, dio ayer por perdida la costera del bonito y solicitó al Gobierno de Lakua que ayude a un sector que atraviesa una «crisis total» y para el que la situación «va a ser dura».

En una entrevista a Radio Euskadi, Zabaleta aseguró que los pescadores «aguantarán hasta el último día» en la campaña del bonito, pero que la costera «ya está perdida, porque en quince días no se puede pescar lo que no has pescado en tres meses, aunque es imposible dejar de pescar antes de que acabe la campaña porque no se sabe cuándo te picará». Asimismo señaló que «ha habido años que habiendo menos cebo, el pescado entraba, pero este año no ha entrado» y ante la flota que trabaja con cebo vivo el «pescado no se detenía, sino que seguía corriendo», algo que, dijo, no han «conocido nunca».

Por ello, preguntado por las ayudas de nueve millones de euros concedidas por Lakua a los pescadores, procedentes del Fondo Europeo de Pesca, Zabaleta aseguró que las ayudas «son todas bienvenidas», vista esta situación de «crisis total», por lo que las cofradías hablarán con el Gobierno de Lakua para saber «de qué forma» se puede ayudar al sector.

Un sector que, según el presidente de las cofradías de Bizkaia, ha multiplicado sus gastos de gasóleo, por lo que pedirán al Ejecutivo que les «eche un cabo», porque, «la flota jamás ha gastado más gasoil que este año» y porque «esto va a ser duro».

El presidente de las cofradías afirmó, por último, que la situación para el colectivo de pescadores, que emplea indirectamente a otros cinco o siete trabajadores, y para los trabajadores auxiliares como conserveros o rederas, es «muy mala».