Muere el líder de uno de los principales partidos chiíes de Irak
El líder de uno de los partidos chiíes más poderosos de Irak, Abdulaziz al-Hakim, falleció ayer en un hospital de Teherán como consecuencia de un cáncer de pulmón. Su muerte se produce en un momento de incertidumbre ante los próximos comicios generales de enero.GARA |
Abdulaziz al-Hakim, líder de uno de los partidos chiíes más poderosos de Irak, falleció ayer en un hospital de Teherán, como consecuencia del cáncer de pulmón que padecía desde hacía más de dos años.
La muerte de Al-Hakim se produce en medio de la incertidumbre política que vive Irak ante las elecciones generales y tan sólo dos días después del anuncio de la formación de una nueva alianza chií liderada por su partido, el Consejo Supremo Islámico Iraquí (CSII).
Trayectoria
Nacido en 1950, Al-Hakim, fue encarcelado en 1972 por sus acciones políticas. Asimismo, desempeñó un importante papel en la revuelta popular chiíta de 1977. Tuvo que huir al extranjero en 1979, y en 1982 fue uno de los fundadores de la Asamblea Suprema para la Revolución Islámica en Irak desde su exilio en Irán.
Desde 2003 dirigió el CSII, después de que su hermano, el gran ayatolá Muhamd Baqer al-Hakim, falleciera en un atentado. Ahora se prevé que sea su hijo, Ammar al-Hakim, quien le suceda frente al CSII.
El partido, abiertamente religioso, se convirtió en un actor político importante en Irak, tras la invasión encabezada por Estado Unidos en 2003. Después de la caída del régimen de Saddam Hussein, Al-Hakim formó parte del Consejo de Gobierno transitorio.
Así, el CSII cuenta con varios miembros al frente de ministerios. Gran parte del apoyo que recibe el partido, se debe al nombre de la familia Al-Hakim, reverenciada entre los chiítas.
Aunque el CSII perdió terreno frente al Partido Islámico Dawa en las elecciones provinciales del pasado enero, celebradas bajo la sombra del fraude en algunas regiones, el partido de Al-Hakim, sigue gozando de un amplio respaldo y se perfila como un duro rival en las próximas elecciones generales de enero.
Un político respetado
Varios politicos iraquíes lamentaron la muerte de Al-Hakim. El primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, se refirió al líder del principal partido chií como «pilar fundamental en el proceso de construcción del nuevo Irak».
Por otro lado, el presidente del Parlamento Iraquí, Yad al-Samerrai, calificó al dirigente político fallecido como «uno de los símbolos del nuevo Irak».
El Consejo Supremo de Irak, por su parte, lo consideró un ejemplo y destacó que Al-Hakim «trabajó y se sacrificó durante toda su vida a favor de su país».
La muerte de Al-Hakim se produce en medio de la incertidumbre política que vive Irak ante las próximas elecciones generales y tan sólo dos días después del anuncio de la formación de una nueva alianza chií.