Europeo de Polonia
La generación del 88-89 sale al escaparate polaco
Participan hasta 21 jugadores menores de 21 años, con Rubio, Batum, Koufos, Calathes y Macvan a la cabeza.
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
Aunque seguro que se terminarán echando en falta nombres como Nowitzki, Jasikevicius, Calderón, Papaloukas, Diamantidis, Holden o Kaukenas, estas renuncias han llevado a las selecciones a apostar por jovencísimos en este Europeo de Polonia. Aunque desde que la NBA apostó por abrir sus fronteras es cada vez más fácil encontrar jóvenes talentos, la cita continental es una magnífica oportunidad para seguir las evoluciones de estas nuevas promesas.
En este sentido, destaca sobremanera que son 21 los jugadores nacidos en el año 1988 o posteriores, con Ricky Rubio, base titular de una de las, a priori, máximas favoritas como benjamín del torneo sin llegar a tener cumplidos los 19 años. El base catalán, que ha aparcado su sueño de jugar en la NBA durante unos años para seguir creciendo cerca de casa -pero con los bolsillos llenos tras fichar por el Barcelona- representa un ejemplo de precocidad con su debut en la ACB con 16 años. Tiene un futuro espléndido, a pesar de que en este comienzo de Europeo parece estar notando la presión de todo el revuelo mediático creado en torno a su fichaje por el Barça y por el favoritismo exagerado asumido por la prensa española.
Titular en Portland
El que sin haber cumplido 21 años ya ha cruzado el charco y ha conseguido incluso ser titular en los Portland Trail Blazers es el talentoso alero francés Nicolas Batum. Al habitual poderío atlético de los jóvenes franceses, Batum acompaña con una gran técnica, lo que le ha convertido en uno de los referentes de su selección, en cuyas selecciones inferiores se ha labrado una impresionante trayectoria que está confirmando.
También tienen toque yankee las dos perlas de la prolífica cantera helena que tratarán de cubrir los huecos dejados por varias estrellas de su selección, ya que tanto Kostas Koufos como Nick Calathes, ambos del 89, se han formado en las universidades estadounidenses. Nick Calathes viene a cubrir en la medida de sus posibilidades las vacantes de Papaloukas o Diamantidis, ya que este jugador de los Gators de Florida se puede amoldar a cualquiera de las posiciones exteriores, ya que ha jugado desde base a alero, aunque posiblemente por altura tendrá que centrarse más en jugar de uno o de dos.
Formado en Ohio State, Kostas Koufos es un siete pies no demasiado atlético pero sí ágil y con buena mano que ya dejó detalles ante la floja línea interior macedonia.
Sería bonito que durante el campeonato pudiera repetir las peleas que tuvo en la final sub-18 de Madrid con Macvan, que se ha hecho un hueco en la apuesta por la juventud que Ivcovic ha hecho en Serbia y que le sirvió para dar la primera gran sorpresa del torneo. Bjelica, Markovic o Raduljica tuvieron menos protagonismo en el sopapo a la llamada ÑBA.
Alemania también ha tenido que apostar por la juventud y cuenta con cinco jugadores menores de 21 años: Pleiss, Harris, Benzing, Ohlbrecht y Staiger y no les va nada mal. Quizá sólo se echa en falta una perla lituana o eslovena, que las habrá.
Serbia cuenta con cuatro jugadores menores de 21 años y Alemania con cinco y no les ha ido nada mal, ya que han vencido a España y Rusia, finalistas en el último europeo respectivamente.
Batum ya es titular con Portland, Ricky Rubio ha preferido seguir creciendo en el Barcelona, mientras que los griegos Koufos y Calathes triunfan en las ligas universitarias.
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