Una juez de Barcelona acordó mantener la suspensión de la autorización al Ayuntamiento de Arenys de Munt para el referéndum sobre la independencia de Catalunya del domingo, mientras que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha autorizado la manifestación convocada por Falange ese mismo día.

La titular del Juzgado Contencioso-Administrativo número 14 de Barcelona confirmó la resolución que dictó provisionalmente la semana pasada, destacando que la celebración de la consulta popular «invade manifiestamente competencias reservadas expresamente al Estado por la propia Constitución».

Actos fascistas, sí

Paralelamente, el TSJC dio también ayer la razón a Falange y revocó la decisión de la Generalitat de Catalunya de cambiar al día 29 la concentración que este grupo fascista convocó para este domingo en Arenys de Munt en protesta por el referéndum.

El TSJC admite que ante la coincidencia del referéndum independentista y de la concentración falangista, «el riesgo de enfrentamientos violentos es probable y razonable», pero remarca que cambiar la fecha del acto fascista «no sería proporcional, puesto que lo desnaturalizaría».

En este sentido, remarca que la Generalitat puede adoptar «medidas limitativas alternativas menos gravosas» para evitar incidentes.

CiU, ERC e ICV-EUiA criticaron la decisión judicial, mientras que el PP y Ciutadans la aplaudieron.

Por otra parte, la CUP anunció que extenderá la organización de consultas como la de Arenys de Munt a otras localidades de los Països Catalans.