«Una visión de Euskal Herria a través de lo que ha sido la pintura vasca»
Tras la publicación del libro «La pintura vasca, obras escogidas», el autor ha organizado una exposición en la sala de la Rotonda de Donibane Lohizune.
Este verano ha publicado el libro «La pintura vasca, obras escogidas» con la editorial Pimientos. ¿Qué ofrece este nuevo libro sobre la pintura?
Primero hubo un libro que fue publicado en 2006 y que fue co-escrito con Alexander Hurel, director de la editorial Pimientos. El libro se titula “Siglo de pintura en el País Vasco” y cuenta el periodo entre 1850 y 1950. Ese libro me inspiró, y es por ello que lo menciono; el segundo, trata de un complemento que habla también de la pintura contemporánea. El segundo libro se titula "La pintura vasca, obras escogidas", con obras que han sido escogidas por mí, y permite presentar cuadros más o menos conocidos y que forman parte de colecciones públicas y privadas, que están comentados. Se supone que comienza a partir del siglo XIX; antes de esta fecha no hay una pintura vasca que se pueda denominar con ese nombre porque la pintura en los siglos XVII y XVIII es esencialmente en los talleres, y los pintores vascos iban a pintar a Madrid o a París. A partir del siglo XIX, empieza a haber pintores vascos o que vienen de fuera a pintar en Euskal Herria. Es por ello que el segundo libro empieza en esa época y se termina, esa es la novedad, con los pintores contemporáneos.
Sobre el periodo que se trata en los dos libros, ¿cuál es la diferencia entre ambos?
El primer libro estaba dispuesto para contar una historia al lector, cuenta la historia de la pintura de la escuela de Ziburu, de Bilbo... Contaba una historia y estaba ilustrada. Ahora son realmente obras escogidas de diferentes artistas y al lado un comentario. Se trata de cuadros de colecciones públicas y privadas, lo que supone la riqueza del libro, ya que estos últimos se conocen menos. Los comentarios por un lado los hago yo de la manera más didáctica posible y la otra originalidad del libro son los co-autores. Cuando tuve la idea del libro fui a ver unas treinta personas y les propuse escribir un texto libre sobre un cuadro, un pintor, su sentimiento hacia la pintura vasca o sobre la cultura vasca. Se trata de gente que he elegido yo, porque tenía ganas de que participaran y se trata de gente relativamente ecléctica, gente que tiene que ver con el arte o no. Va desde Itxaro Borda, Pier-Pol Berzaitz, Naia Robles, Maddi Oihenart, Michel Cendres... gente conocida y que puede tener una mirada pertinente sobre la pintura vasca. Es una visión un poco impertinente y original.
¿Por qué es impertinente?
Yo no he sido impertinente porque no es mi papel, pero entre los co-autores hay gente que ha dicho cosas. No quiero desvelar el qué, porque eso forma parte del placer de la lectura, pero yo me he divertido mucho leyéndolos. Los textos son tan libres, que hay cosas muy poéticas, algo impertinentes, algunas que se preguntan qué es la identidad vasca, gente que ha evocado recuerdos de la infancia... Es algo sorprendente que aporta una riqueza interesante.
La pintura es la protagonista pero luego hay una mirada que va más allá.
No quería que fuese un libro para especialistas, aunque yo sea un apasionado de la pintura. El primer libro contaba una historia que ofrece al lector una idea sobre lo que es la pintura vasca, que durante mucho tiempo y hasta hace poco ha sido subestimada. Hay obras fundamentales en Hego Euskal Herria, pero en Iparralde no se había escrito nada. El segundo libro quería que fuese para hacer descubrir la pintura a la gente pero a los que están enamorados de la cultura de Euskal Herria, para que tengan una visión a través de lo que ha sido la pintura vasca. También quiero explicar que la pintura vasca no se acaba con Aurelio Arteta o Ramiro Arrue, no es solo la pintura de los años 30 sino que continúa, el dinamismo cultural continúa y hay pintores contemporáneos que son verdaderos artistas que en algunos casos están mejor considerados fuera de aquí . Sigue habiendo un alma y una cultura vasca que sigue siendo rica y que está presente.
¿Hay algún proyecto para traducir el libro al euskara o al castellano?
El editor me ha dicho que parece que hay una institución de Hego Euskal Herria que está interesada en comprar los derechos del libro para publicar una edición bilingüe en euskara y en castellano. Es tan sólo un proyecto pero yo estoy muy contento con ello. Se trata de un libro que concierne a la gente de Hego Euskal Herria porque hay muchos artistas de allí, va desde la escuela de Baztán o el Bidasoa, hasta el grupo de Bilbo. Voluntariamente he querido que el libro trate todo Euskal Herria y no tan sólo de Iparralde. Hace varios años se editó un libro, y no es una crítica, que se titulaba "La pintura vasca" y que se limitaba a Iparralde pero para mi Euskal Herria es una entidad más amplia y creo que cuando se habla de los pintores de aquí también hay que hablar de Arteta, de Zuloaga... de toda esa gente que forman esa escuela de pintura en Euskal Herria.
Yo quería reunir los dos. En el libro se ve que ofrezco una forma de acercarse a la pintura de otra manera. Por ejemplo, Arteta que es uno de los grandes pintores del País Vasco y que era de Bilbao ofrece una visión más industrial, más sensible a la vida de los obreros, además de los campesinos, también ofrece una visión de los barrios obreros, de la industrialización de Bilbo en los años 30; un tipo de pintura que no se puede encontrar aquí. Se trata de una temática diferentes con sus particularidades.
Ha organizado varias conferencias con los colaboradores del libro.
El Ayuntamiento de Donibane Lohizune me propuso que además de la exposición sobre el libro, hiciese también una visita guiada, pero me pareció que sería más interesante hacerlo con los artistas. La última cita tendrá lugar el 9 de setiembre. Haremos una síntesis sobre los dos meses de exposición que se llamara “Mirada sobre la pintura vasca”, que quiere decir todo y nada. Presentaré la exposición de forma rápida y también estarán presentes dos artistas que aprecio mucho, Christine Etchevers, de la que hay una obra en la exposición y que es una gran promesa de la pintura vasca, y también estará Aitor Mendizabal, que es pintor pero sobre todo es un gran escultor actual, muy reconocido sobre todo en Gipuzkoa. Durante dos meses ha sido como un museo efímero. I. E.