El progresivo «asalto» del Consistorio de Iruñea a San Fermin Txikito, las populares fiestas de Alde Zaharra de la capital navarra, conoció ayer un nuevo salto cualitativo. En 2009 ni siquiera habrá un pronunciamiento del Pleno del Ayuntamiento al respecto. La moción presentada por los vecinos del barrio de Nabarreria, que hicieron suya tanto Nafarroa Bai como la izquierda abertzale, no pudo debatirse ni votarse. Los ediles de UPN, del PSN y la del PP levantaron sus manos al unísono para impedir el acceso a trámite.

La constatación de que estos grupos se lavan las manos hizo que los vecinos presentes protestaran desde el público. La respuesta de José Iribas, primer teniente de alcalde, fue ordenar a la Policía Municipal que los desalojara y suspender la sesión durante unos minutos. Con ello el tema queda zanjado a nivel institucional, ya que no se celebrarán más plenos antes de que se inicien las fiestas, el próximo viernes día 25. Así las cosas, el equipo de gobierno que dirige Yolanda Barcina tiene las manos libres para responder o no a la petición de permisos. Hace un año, el PSN sí se alineó con los vecinos, pero ahora ha dado cobertura a UPN.

Como es sabido, por segunda vez consecutiva el Ayuntamiento de UPN ha presentado sus propios actos festivos, muchos de ellos copiados del programa popular tradicional. Ha ubicado muchos de ellos en el Redín, la zona en que la Comisión de Fiestas de Alde Zaharra quiere ubicar una txozna que le permita autofinanciar sus iniciativas. Y, en paralelo, no ha respondido a la petición de permisos. Por todo ello, los vecinos consideran que se está produciendo un auténtico sabotaje a una fiesta tan tradicional y exitosa en Iruñea.

Pueyo afea su actitud a Barcina

Aunque ya se conocía que UPN y PSN no iban a permitir el acceso a trámite, en el Pleno quedó en evidencia el interés de la alcaldesa en esquivar la cuestión. Yolanda Barcina trató de que la moción ni siquiera se pusiera sobre la mesa, argumentando que parte de la Corporación tenía que acudir al acto de apertura de curso en la UPNA.

Esta actitud fue afeada por Mariné Pueyo. La edil independentista replicó a Barcina que «la obligación de los corporativos, en primer lugar, es atender al Pleno, y las fotografías vienen después». José Iribas salió en defensa de la primera edil para argumentar que acudir a esos actos protocolarios también está entre los deberes de la alcaldesa. «Si había alguna cuestión urgente, era ésta», le reprochó por su parte Aritz Romeo (NaBai), aludiendo al hecho objetivo de que sólo falta una semana para San Fermín Txikito.

Mientras, la Comisión de Fiestas sigue con su programa para calentar motores. Así, hoy saldrá de la calle Aldapa una kalejira que terminará en la Plaza San Francisco, donde se elegirá a la Corporación txiki. Si llueve, será en el frontón de la Mañueta.