Reunión en Gasteiz
Ladrillos para el nuevo San Mamés en forma de acuerdo
El lehendakari y García Macua acercan posturas para la entrada del Gobierno de Gasteiz en el proyecto.
Amaia U. LASAGABASTER |
La reunión entre Patxi López y Fernando García Macua concluyó como cabía esperar, a tenor de las declaraciones públicas realizadas por todas las partes en las últimas jornadas. Es decir, se acercaron posturas para alcanzar un principio de acuerdo, con lo que el nuevo San Mamés está un poquito más cerca.
Metafóricamente hablando, porque ciñéndose al tiempo, al nuevo estadio le quedaría aún bastante tiempo para ver la luz: el nuevo San Mamés sería totalmente operativo en 2018, fecha en la que España y Portugal aspiran a organizar el Mundial de Fútbol, una de cuyas sedes podría ser, precisamente, Bilbo.
Según el comunicado conjunto que hicieron público las dos instituciones, no parece que la negociación ofreciera demasiados problemas en el punto al que más importancia se estaba concediendo desde Lakua, la gestión y explotación del nuevo estadio. Tal y como se reclamaba desde lehendakaritza, serán públicas, ya que quedarán en manos de San Mamés Barria S.L., de la que formarían parte el propio Gobierno de Gasteiz, la Diputación Foral de Bizkaia, el Ayuntamiento y la BBK. La prioridad, sin embargo, serán las necesidades del club rojiblanco. Es decir, será el Athletic el que determine el uso del campo de fútbol, ligado a sus actividades deportivas. A salvo de tal circunstancia, se impulsará la mayor utilización pública de la instalación, en actividades permanentes que sean acordadas por los socios de San Mamés Barria.
Tal y como se solicitaba desde el Athletic, el Gobierno de Gasteiz entrará en esta sociedad aportando 55 millones de euros -cantidad idéntica a Diputación Foral y BBK, a los que se añaden los 42 que aportará el Athletic y los diez que, en forma de condonación de impuestos, añadirá el Ayuntamiento-, aunque también en este caso hubo que limar diferencias. Dada la situación económica, el plazo de aportaciones de Gasteiz se acomodará a las disponibilidades presupuestarias, comenzando en 2010.
A falta de que se materialice el acuerdo definitivo -el resto de entidades implicadas deberán dar su conformidad a lo pactado ayer-, Patxi López y Fernando García Macua se mostraron satisfechos con el resultado de la reunión y coincidieron en valorar que el proyecto «no sólo supone un nuevo campo de fútbol, sino que lleva aparejada la creación de numerosos puestos de trabajo y la regeneración urbanística de Olabeaga y la zona de San Mamés», permitiendo además la ampliación de las instalaciones de la UPV y la mejora de los accesos a Bilbo.
Un largo trayecto
El acuerdo supone un nuevo -y, en principio, definitivo- paso para un proyecto que echó a andar de manera oficial hace dos años y medio. En marzo de 2007, la Asamblea de Compromisarios del Athletic daba su visto bueno a la propuesta de la directiva rojiblanca, presidida entonces por Ana Urquijo. Unos días después se mostraban al público diseños, maquetas y detalles varios de un proyecto que, de haber valido las estimaciones iniciales, estaría ya prácticamente completado. Se habló entonces de colocar la primera piedra a principios de 2008, para que dos tribunas y un fondo estuvieran construídos en 2010 y el campo totalmente operativo en 2012.
Mayo de 2009 fue la nueva fecha para la primera piedra tras la llegada de García Macua a Ibaigane, que también se tradujo en alguna variación en el proyecto inicial, elevando el aforo a 58.000 espectadores y el presupuesto a 235 millones de euros.
Tampoco valieron esas estimaciones, que se han visto reducidas en los números y ampliadas en el tiempo. Según el último proyecto, que cuenta con el visto bueno de todas las partes implicadas, el nuevo San Mamés tendrá un aforo de 53.000 espectadores y un presupuesto de 175 millones. Su construcción puede arrancar el próximo año y culminar en 2018.
El Gobierno de Gasteiz entrará en San Mames Barria S.L. con 55 millones de euros de aportación, al igual que la Diputación Foral de Bizkaia y la BBK. El plazo de aportaciones, sin embargo, se acomodará a las disponibilidades presupuestarias del Ejecutivo de Patxi López.
Sin tiempo para recuperarse del fabuloso partido ante el Austria, el Athletic se prepara ya para afrontar otro examen que ponga a prueba el buen momento de los rojiblancos. Una prueba, en principio, de mayor entidad que las anteriores, por mucho que el Villarreal haya arrancado la temporada a trompicones.
En el equipo, por si acaso, ya advierten de que el choque de mañana será «bastante más difícil» que el del jueves. «No tiene nada que ver -reconocía Gaizka Toquero-. El Villarreal es un equipo muy fuerte y va a ser bastante más difícil. Aunque estamos jugando muy bien y a día de hoy podemos ganar a cualquiera», apuntó. «Es un grandísimo equipo», añadió Javi Martínez. «Puede que el Villarreal no esté haciendo un gran inicio de Liga, pero en cualquier momento puede empezar a hacer su fútbol. Vamos a tener que correr, pero también tendremos nuestros momentos de juego», coincidió el navarro que, al igual que su compañero, regresará mañana al once inicial.
En Castellón tampoco las tienen todas consigo ante la visita a San Mamés. Ernesto Valverde destaca que para ganar en Bilbo «hay que jugar con corazón». Lo que no significa «pegar patadas», sino «defender fuerte y atacar con ansias de marcar». En caso contrario, «las opciones de ganar son muy pocas».
El ex técnico rojiblanco, que se ha estrenado en su nuevo equipo con dos empates ligueros y triunfo por la mínima en la Europa League, cree que al Villarreal le espera «un partido muy complicado», aunque saldrá «a por los tres puntos». «En San Mamés la afición aprieta mucho y además ahora el equipo está en una dinámica positiva. Nosotros estamos en la otra fase, en la que nos cuesta mucho materializar las ocasiones», admitió. A.U.L.