El vencedor de las elecciones legislativas griegas, el socialdemócrata Georges Papandreu, recibió ayer el encargo del presidente heleno, Karolos Papulias, para formar Gobierno tras su abrumadora victoria frente al conservador Kostas Karamanlis.

El Movimiento Socialista Panhelénico (Pasok) obtuvo 160 de los 300 escaños que forman el Parlamento griego, de manera que tendrá un margen suficiente para afrontar los grandes retos económicos que se le presentan en medio de un complicado panorama.

En el mismo momento en que Papandreu tuvo conocimiento de los resultados electorales, afirmó que «no tenemos un día que perder». Así deberá ser, ya que anunció un «plan inmediato de cien días» y cinco proyectos de ley «para tonificar la economía», desarrollar las inversiones públicas y sacar al país del borde de la recesión.

El ambicioso plan de Papandreu contempla medidas como un incremento de los salarios y las pensiones por encima de la inflación, o la congelación de impuestos como el IVA, o una mayor carga fiscal para los ricos.

También pretende lanzar un plan de inversiones valorado en, al menos, el 4% del PIB nacional en un plazo de tres años, controlar el gasto público y recibir más ingresos tributarios gracias a combatir la evasión fiscal.

Déficit público

Con un déficit público superior al 7%, Papandreu ha prometido una reducción, en tres años, por debajo del 3% exigido por el Tratado de Maastricht.

Según fuentes socialdemócratas, Papandreu pretende construir un gabinete de catorce ministerios e introducirá un modelo dirigido a recuperar la economía y la confianza del ciudadano en el Gobierno.

Entre las innovaciones, se incluyen la separación del ministerio de Finanzas del de Economía, para poder controlar de cerca las reformas fiscales, las medidas impositivas, la lucha contra la evasión y la corrupción. Otra novedad sería la creación de un ministerio de Medio Ambiente, Energía y Cambio Climático.

También se creará un ministerio de Protección del Ciudadano, que coordinará las labores de protección civil, del cuerpo de bomberos y del orden público, para evitar desastres como los incendios forestales de 2007 y 2009. La política exterior podría quedar en manos del mismo Papandreu, que desempeño ese cargo entre 1999 y 2004.

El nuevo gabinete jurará mañana su cargo y pedirá en dos semanas un voto de confianza del parlamento a su programa.