Un informe de la consultora DBK señala que las empresas de trabajo temporal (ETT) perderán un 30% del negocio económico en 2009 debido a que la contratación temporal se ha reducido de manera pronunciada.

Calcula que el negocio se situará en 2.000 millones, lo que supondrá casi 1.500 millones menos que en 2007. Las estimaciones para 2010 indican que se reducirá la facturación a 1.950 millones.

Las razones de esta pérdida acelerada del negocio se debe, a juicio de DBK, a que «las desfavorables condiciones del mercado propiciarán a corto plazo nuevos planes de reestructuración y de redimensionamiento del sector».

Además, la pérdida de contratación en 2008 llegó al 18,4% y se espera que caiga un 35% este año y un 5% en 2010.