Tajonar
Ludo Delporte vuelve a la disciplina rojilla tras diez semanas de baja
El centrocampista galo ha sufrido 14 lesiones musculares desde noviembre de 2006. Su última recaída data del pasado 4 de agosto.
GARA | IRUÑEA
Las lesiones musculares están siendo un calvario para Ludo Delporte. No obstante, y desde que se lesionara el ya lejano 4 de agosto, el centrocampista galo lograba ayer, por fin, entrenarse al mismo ritmo que sus compañeros, una vez recibido el alta médica. Junto a Delporte, el madrileño Javier Camuñas también recibía las bendiciones del cuerpo médico osasunista, de modo que Juan Antonio Camacho podrá contar con ambos en el próximo duelo liguero que enfrentará a los rojillos este domingo contra el Atlético de Madrid en El Sadar.
Un total de 14 lesiones han machacado una y otra vez a Delporte desde que recalara en las filas de Osasuna, allá por noviembre de 2006. En agosto, durante la pasada pretemporada, se anunció un período de baja de unas seis semanas, pero éste se ha prolongado casi un mes más.
Por su parte, Camuñas, pese a que fue titular en el último encuentro liguero en Getafe, venía arrastrando la última semana una tenosinovitis en el abdomen. De cualquier manera, el jugador madrileño ya había completado las dos últimas sesiones preparatorias sin mayores contratiempos, de modo que los servicios médicos del cuadro iruindarra no tenían mayor inconveniente que darle el alta en la jornada de ayer.
Por contra, el interior derecho navarro Jokin Esparza se tuvo que retirar del entrenamiento al sufrir molestias en el adductor del muslo derecho. El alcance de su lesión se valorará hoy, cuando se le realice una resonancia magnética.
Para recibir al Atlético de Madrid, Camacho tiene como bajas seguras al delantero portugués Eduardo Fernandes 'Dady', que arrastra desde hace semanas una lesión muscular, y al defensa brasileño Roversio Rodrigues, que no se unirá al trabajo con el grupo al menos hasta la próxima semana por las molestias en la rodilla derecha operada hace casi un año.
Fiabilidad en casa
El portero madrileño de Osasuna Ricardo, ex del Atlético de Madrid, era el encargado de hablar para la prensa. El guardameta rojillo, pese a reconocer la «pegada» del cuadro colchonero, subrayaba la importancia de «hacerse fuertes» en El Sadar.
«Creo que tenemos que mirarnos a nosotros mismos. Jugamos en nuestro campo y no tenemos que estar pendientes del contrario. Sabemos que el Atlético es un gran equipo, que tiene una gran pegada, pero Osasuna tiene que hacerse fuerte en El Sadar», declaraba, al tiempo que recalcaba la buena labor defensiva del equipo.
«El año pasado encajamos pocos goles y en eso continuamos trabajando. Tenemos que mejorar en la faceta que nos caracteriza: ser fuertes en defensa y jugar lejos de nuestra portería. Personalmente me estoy encontrando con mucha ilusión y muchas ganas. Estoy deseando de que llegue el domingo para jugar ante un rival del que siempre tendré un pedacito en el corazón», confesaba.
Cuestionado sobre una posible mayor presión tras la derrota frente al Getafe, Ricardo negaba la mayor, y ponía como ejemplo de «verdadera presión» la situación de la pasada campaña, cuando Osasuna cerraba la primera vuelta muy lejos de la salvación.
«La presión estaba el año pasado cuando teníamos 13 puntos. Eso nos ha hecho ser más fuertes y nos ha hecho pensar que somos capaces de cualquier cosa. Sólo tenemos que pensar en salir al campo cada domingo al 120%. Si queremos tener opciones, tenemos que dar lo máximo. Mirar arriba nos lo darán los partidos y eso tendremos que currárnoslo durante la temporada», remachó.
Pese a la calidad del Atlético de Madrid, no es un rival que se le dé mal a Osasuna. En los siete últimos enfrentamientos en Iruñea, los navarros han sumado cinco victorias, un empate y una sola derrota.