El presunto militante de ETA Ibai Sueskun compareció ayer en el Tribunal de París, y el juez instructor solicitó su ingreso en prisión, aunque al cierre de esta edición aún se encontraba a la espera de comparecer ante el juez de las Libertades y Detención, quien se encarga finalmente de la última decisión.

París imputa al joven los cargos de «asociación de malhechores en relación con una empresa terrorista», «infracciones de la legislación sobre armas», «posesión de documentos falsos» y «receptación de robo».

Sueskun fue detenido el pasado sábado en Lescun, localidad situada a pocos kilómetros de Euskal Herria. Al parecer, antes de su detención acudió a un caserío para pedir auxilio por una herida de bala en la mano.

Según esta versión, los propietarios de la casa alertaron a la Policía. Tras pasar por los hospitales de Oloron y Baiona, y también por la comisaría de la capital labortana, fue trasladado a París el martes. Junto a Sueskun también fueron conducidos a París Iurgi Mendinueta y Joanes Larretxea, detenidos el domingo. Se espera que ambos comparezcan hoy ante el juez.