El consejero de Transportes, Iñaki Arriola, anunció ayer que se ha adjudicado el estudio informativo del proyecto de suburbano a la UTE formada por las ingenierías Sestra, ETT y Euroestudio, que tienen un plazo de año y medio para elaborar el informe que se centrará en la movilidad y los estudios geotécnicos. Este trabajo cuesta 2,2 millones de euros.

Su objetivo será definir el trazado entre Irun y Lasarte, las nuevas estaciones, así como la viabilidad técnica y financiera del metro, que Arriola calificó como «la mejor solución» para paliar los problemas de movilidad. Incidió en que se impulsará el trazado urbano y subterráneo de la infraestructura, que quiere constituir «un auténtico servicio comarcal» y que dará cobertura en Donostia el eje comprendido entre Anoeta, Amara, La Concha, Ondarreta, Universidad y Lugaritz.

La primera propuesta, que se analizará en el estudio informativo, mantiene que se soterre la vía entre Anoeta y Amara, cuya estación dejará de ser «terminal» para convertirse en «pasante», y que el trazado continúe por un túnel que se excavará en el cerro de San Bartolomé.

La nueva estación intermodal de Riberas de Loiola y la ampliación de la red a zonas en las que no tiene servicio serán también tratadas en el estudio, que abordará la viabilidad de la conexión entre Irun, el aeropuerto y Hondarribia.