Los abogados del ex primer ministro francés Dominique de Villepin pidieron ayer la absolución de su cliente en el «caso Clearstream», al tiempo que denunciaron un «juicio político» orquestado por el actual presidente, Nicolas Sarkozy.

Los letrados aseguraron que el juicio ha demostrado la inocencia de De Villepin y rechazaron la condena de dieciocho meses de cárcel exentos de cumplimiento y 45.000 euros de multa que solicitó la víspera la Fiscalía.

Para el abogado Olivier Metzner, los argumentos del Ministerio Público, según los cuales Villepin es culpable del caso por haber guardado un «silencio cómplice», no se sostienen.

La Fiscalía pidió la condena del ex primer ministro al considerar que conocía en 2004 la falsedad de los listados de nombres de beneficiarios de cobros de comisiones ilegales conocido como «caso Clearstream» y, pese a ello, haber guardado silencio. Según el fiscal, De Villepin no hizo nada para denunciar esa falsedad, lo que le convierte en cómplice del delito.

Entre los nombres que figuraban en ese listado estaba el de Nicolas Sarkozy.