Raimundo Fitero
Automático
Los que viajamos en avión con asiduidad nos convertimos en una escuela de anecdotario de retrasos y facturaciones, de incidencias de vuelos, despegues y aterrizajes. Sin ir más lejos, este cura tuvo el lunes una magnífica experiencia. Con billete para salir de Loiu, la huelga hizo que se cambiara por otro con salida en Hondarribia para que la niebla que apareció durante dos horas nos llevara de viaje en autobús hasta Noain donde emprendimos el vuelo con un retraso que nos colocaba al borde de la pérdida de otras conexiones a muchos del pasaje. Bonito, ¿verdad?
Pero llevamos sufriendo un serial de ciencia ficción y terror sobre un vuelo, en concreto de la compañía americana Northwest Airlines que desde que apareció la primera noticia se ha cambiado la versión tres veces, por lo que dudamos de las tres y de las que puedan venir posteriormente. Se trata de un avión que se pasó más de doscientos kilómetros de su destino, Minneapolis. Pasó de largo, de tal manera que según algunas versiones pusieron en marcha los protocolos de seguridad por el temor a un secuestro y tuvieron que intervenir los cazas del ejército para llamar la atención a los pilotos. ¿Pilotos, qué pilotos?
La primera versión que se conoció por Internet, prensa escrita, radio y televisión es que los pilotos iban discutiendo acaloradamente en la cabina y se les fue la olla, o sea estaban mentándose a sus muertos y pasaron del pasaje. La segunda versión es que la tripulación iba dormida y se pasaron del destino mientas roncaban. Y la tercera aparecida ayer, es que iban mirando un ordenador portátil y discutiendo sobre subidas de salarios, rutas y cosas por el estilo. En las tres versiones, es el piloto automático el que controla el aparato. Es la técnica la que suple a los pilotos que dicho sea de paso, cobran un pastón porque son unos especialistas. ¿Se pude creer alguna de las versiones? ¿Las tres? Entre al primera y la tercera hay concomitancias. La conclusión es poco favorecedora para los que tienen miedo a volar ya que queda claro que la seguridad de la navegación aérea está solamente en los dispositivos tecnológicos. Artículo escrito por mi piloto automático.