Liga ACB
En Illunbe hubo dos rocas
Lagun Aro GBC, con Panko y Doblas como referentes, suma ante Gran Canaria su cuarta victoria liguera.
Imanol INTZIARTE I
La Roca es el sobrenombre del cuasi inexpugnable feudo en el que el Gran Canaria disputa sus partidos como local. Ayer, los insulares encallaron en Donostia frente a dos sólidas rocas llamadas David Doblas y Andy Panko. Con 24 de valoración por cabeza, el pívot cantabro -12 puntos y 10 rebotes- y el chico para todo de Harrisburg -14 y 10- fueron el amarre al que Gipuzkoa GBC se aferró en los momentos calientes para situarse con un balance de 4 victorias y 3 derrotas. El complemento lo pusieron Ignerski y Barbour, que firmaron 15 puntos cada uno.
Fue un choque correoso, con muchas pérdidas de balón debido a los rigores defensivos y en el que, acudiendo al argot ciclista, Gipuzkoa Basket lanzaba un ataque tras otro y Gran Canaria hacía la goma, volviendo a ponerse a rueda de los donostiarras. Pero los de Laso llegaron más frescos al último repecho y se hicieron con un merecido triunfo.
El técnico canario, Pedro Martínez, sorprendió colocando a McDonald en el cinco inicial, aunque el ex baskonista -partido lamentable, con 1 de 7 en tiros de dos- se fue al banco a los cuatro minutos. Fue el pagano del fulgurante arranque local, con Ignerski y Barbour martilleando el aro -8 y 11 puntos respectivamente en el primer periodo-, y Doblas dominando bajo los aros.
El tiempo muerto solicitado con 13-2 y la continua rotación de jugadores amarillos no inmutó a los locales, que llegaron a ponerse 24-9. Primer hachazo y primera remontada hasta el 24-16, al término de los diez primeros minutos.
La dinámica se repitió con la presencia de los actores secundarios. Ante una escapada local hasta el 38-24, los canarios optaron por ir a cuchillo en defensa, a riesgo de cargarse de faltas. Les funcionó, para enfado con los permisivos árbitros del público y de un Laso cuyas protestas le costaron una técnica.
Un parcial de 1-13, con un hasta entonces desaparecido Jaycee Carroll liderando el ataque, dejaba el electrónico en un apretado 39-37 al descanso. Con el quinteto titular blanquiazul otra vez en cancha se produjo el tercer intento (52-42, minuto 26). ¿Sería el definitivo? Tampoco. Se entró en el periodo final con 58-53.
El temor se apoderó de Illunbe cuando, a falta de 4.22, los visitantes tomaban el mando (61-62). Llegaba el momento de la verdad y, esta vez sí, GBC supo gestionar los últimos instantes. Doblas y Panko tomaron el timón y no lo soltaron hasta el 76-70 definitivo. El próximo domingo toca el Barça en el Palau, palabras mayores.
El Real Madrid no cede en el liderato y ayer consiguió su octava victoria en otros tantos encuentros, tras superar al DKV Joventut por 84-70. Aunque el partido resultó bastante igualado en la primera parte, con ventajas incluso para la Penya, la irrupción del talentoso ala-pívot serbio Novica Velickovic desniveló la balanza para el bando merengue.
El 14 blanco ofreció brega y puntería por partes iguales para erigirse en la figura más destacada de su equipo con 29 puntos y 13 rebotes. Junto a él, otro de los jóvenes pilares del equipo Sergio Llull amortizó su tiempo en cancha junto a Prigioni para subir el pistón en defensa y completar una gran actuación en ataque.
Con su victoria de ayer, el Lagun Aro se coloca en puestos de play off, con el derbi ante el Bilbao Basket todavía pendiente de disputarse y, lo que aún es más importante, aumenta su colchón con los equipos en puestos de descenso, donde hay más implicados que nunca, a dos victorias. En la lucha por evitar esas posiciones, el farolillo rojo Murcia logró una importante victoria en casa ante el Xacobeo por 86-66. J.O.
