El Cross de Reyes cumplirá mañana 80 ediciones. La prueba internacional, que anualmente organiza la sociedad Gimnástica de Ulia, ha llegado a octogenaria que no es poco. Disputada por primera vez en 1918, aunque con algunas interrupciones, las mujeres se incorporaron en 1966. Es la carrera pedestre más antigua de Euskal Herria y en el Estado español sólo la Jean Bouin barcelonesa le supera en veteranía. La Gimnástica de Ulia ha capeado todos los temporales, desde los meteorológicos -se celebra el 6 de enero junto al mar- hasta los económicos, pasando por los organizativos.

Indudablemente ha conocido tiempos mejores, pero hay sigue, e incluso en esta edición algo más tranquila porque han incorporado a Honda, un nuevo sponsor más fuerte que las pequeñas empresas y comercios que permanecen fieles a la prueba y comparten con Kutxa el patrocinio.

Agustín Atanasoff, el nuevo presidente de la Gimnástica, dijo ayer durante la presentación en la sede gastronómica que «cada año es más difícil, por eso estamos agradecidos». En esta ocasión aspiran a cuadrar números y quedar parra. Ellos se mueven entre cifras modestas.

Últimamente el dinero parece ser el tema de referencia en las presentaciones deportivas. Se nota la crisis, pero en un territorio con variedad y cantidad de propuestas deportivas también preocupan otros aspectos.

Principales participantes

Los 18.000 euros del presupuesto del Cross de Reyes llegan para organizar la prueba y cubrir desde gastos de megafonía, seguros o alojamientos, a la contratación de atletas y al capítulo de premios con 2.000 euros destinados a los cinco primeros hombres y mujeres de Euskal Herria. No ha alcanzado para el mediofondista burgalés Juan Carlos Higuero, pero sí para los olímpicos Chema Martínez y Ayad Landassem, que podrían protagonizar el duelo en Gros.

A Landassem, originario de Sidi Infi, se le dan bien los años impares en el Paseo de La Zurriola, veremos que tal el par. Venció en 2005, 2007 y 2009 y mañana se enfrentará al madrileño que ha ganado en cuatro de sus cinco participaciones en la Behobia y se estrena en el Cross de Reyes. Habrá más gente conocida animando la carrera masculina, puesto que repiten los otros dos integrantes del último podio, el keniata Thomas Kipkosgei y el argentino Javier Carriqueo. Junto a ellos deberían correr los marroquíes Abdelfattah Louajari -vencedor de la reciente Las Arenas-Bilbao- Aimad Bouziane y Mouloud Zouinat. Entre las mujeres se impone la modestia de las últimas ediciones. La marroquí Malika Asahssah aspira a emular a su compatriota Aicha Bani, la última en vestirse esta txapela.

La norteafricana de 27 años, vencedora de las San Silvestres de Valencia y Salamanca de 2009, alterna los obstáculos con la ruta y tiene un registro de 1.09:54 en medio maratón. María López de Tejada, primera mujer el jueves en la San Silvestre donostiarra y Ainhoa Sanz, campeona vasca de cross corto desde el domingo, son las opciones de casa al podio.