Inicio del Open de Australia
Un abanico más abierto que nunca
La reciente paternidad de Federer y la incógnita sobre la recuperación física de Nadal abren el elenco de posibles candidatos a hacerse con el título. Davydenko, Murray, Djokovic, Roddick y Del Potro están en la parrilla de salida, caso de que los dos primeros fallen.
Natxo MATXIN
El Open de Australia 2010 no sólo abrirá el panorama tenístico del año, sino que puede ser el escenario de un cambio de ciclo en el panorama mundial de este deporte. La hegemonía de la dupla Federer-Nadal de los últimos tiempos podría dar paso al ascenso a la cima de alguno de los aspirantes más cualificados, caso de Murray, Djokovic, Davydenko o Del Potro.
Por circunstancias bien diferentes, tanto el suizo como el mallorquín no se encuentran ahora mismo en el mejor momento de forma, coyuntura que tratarán de aprovechar sus inmediatos rivales. Es por ello que el torneo austral se presenta como uno de los más abiertos de los últimos tiempos.
Ha asegurado que no va a tener mayor influencia en su rendimiento, pero habrá que ver cómo le afecta al número uno del mundo sus recientes obligaciones paternas. De momento, no es el que acabó la campaña pasada y ello lo demuestra su derrota en las semifinales de Doha a manos de Davydenko.
En lo que respecta al balear, será toda una incógnita comprobar si se encuentra recuperado de su problema de tendinitis en ambas rodillas. Desde el torneo de Roma no ha ganado título oficial alguno, aunque se plantó en las finales del Masters 1000 de Shanghai y Doha, y ganó la exhibición de Abu Dabi.
Ante tal panorama, ya hay quien apuesta por el relevo o, al menos, una tregua en el dominio aplastante que hasta ahora han infligido Federer y Nadal a sus rivales. Si nos atenemos al actual estado de forma, el mejor colocado para dar batalla es el mencionado Davydenko. Salvo lesión, el ruso es de los que sabe mantener un alto ritmo competitivo y ya lo ha demostrado triunfando en la Copa Masters y en Doha.
La pareja conformada por Novak Djokovic y Andy Murray le siguen a la zaga. Su poderoso saque será la mejor arma del serbio una vez más, si bien su inicio de temporada es más bien titubeante, con derrotas ante Verdasco y Tomic. Por su parte, al británico le falta dar el salto de calidad necesario que confirme al jugador que se vio cuando consiguió el Open USA de 2008 ante Federer.
Quien también parece recuperado de su lesión de rodilla y aspira a hacerse un hueco en el palmarés del torneo -lo ganó en categoría junior en 2000- es Andy Roddick. El estadounidense ganó en Brisbane después de tener que renunciar a disputar la Copa Masters de Londres. Más problemas parece que va a tener Juan Martín del Potro para rendir a un nivel acorde a su calidad. El argentino tiene serios problemas en su muñeca derecha y es seria duda.
Serena, favorita en el femenino
Bien diferente es la situación en el cuadro femenino. La favorita clara es la recuperada Serena Williams, actual número uno, a la que habrá que ver cómo le afecta la vigilancia especial a la que será sometida después de pagar una multa de 82.500 dólares e imponérsele un periodo de prueba por abuso verbal sobre una juez de línea.
La norteamericana consiguió precisamente su privilegiada posición en la final del año pasado, donde se impuso a Dinara Safina. Este año llega con derrota en la final de Sydney ante la rusa Elena Dementieva y ciertas molestias en su rodilla, que confía en que no sean un obstáculo insalvable para estar al máximo nivel en el primer Grand Slam.
Asimismo, la participación de las belgas Clijsters y Henin animan la competición, donde habrá una mezcla de juventud y veteranía. El primer apartado lo encarnan Wozniacki y Wickmayer, mientras en el segundo siguen incombustibles Safina, Kuznetsova, Jankovic e Ivanovic.
El australiano Roy Emerson es quien más títulos del Open Australia ha cosechado -seis-, todos ellos en la década de los sesenta. El tenista en activo con mayores entorchados es Roger Federer, que acumula un total de tres.
El número uno del mundo, Roger Federer, afronta su primer Open de Australia con la novedad de haber sido padre hace seis meses, lo que cree no afectará a su rendimiento. «El hambre permanece y estoy trabajando tan duro como lo hacía antes y no como si fuera una niñera», dijo.
Rafa Nadal tratará de revalidar el título que consiguiera el año pasado y, de momento, ha tenido suerte en el sorteo. «Mi cuadro parece menos difícil, pero debo jugar bien porque, si no, todo se convierte en complicadísimo. Creo que estoy en buena línea», señaló.
Es toda una incógnita el rendimiento que ofrecerá Del Potro, que intentará superar los problemas que sufre en su muñeca derecha. El de Tandil, que tiene un edema entre los tendones, reconoció que «me duele sobre todo cuando juego de fondo, es bastante molesto».
La pista central del Open de Australia, la Rod Laver Arena, registró un lleno absoluto -17.000 aficionados-, con el objetivo de recaudar fondos para las víctimas del terremoto de Haití. Finalmente, se consiguieron reunir un total de 659.000 dólares australianos.
Djokovic cree que el dominio abrumador del dúo Federer-Nadal en el Grand Slam ha llegado a su fin. «En los dos últimos años las cosas han cambiado un poco y otros jugadores tenemos ahora más confianza en que podemos ganar, eso es muy bueno para el deporte», comentó.