Dicen que «lo bueno, si breve, dos veces bueno», y puede que precisamente sea la fugacidad con la que transcurre el día de San Sebastián lo que hace de ella una fiesta tan especial, de disfrutar y gozar intensamente, sin descanso alguno durante las 24 horas que dura el festejo. La espera se prolonga 364 días; por eso, cuando llega para la mayoría de donostiarras o azpeitiarras no caben excusas para quedarse en casa, no sin antes per- trecharse «debidamente» de barril y palillos.

A la hora de determinar con exactitud el origen de la festividad, aún se desconoce a ciencia cierta cuál es el motivo real, qué es lo que se rememora con la celebración de la tamborrada. Algunas teorías apuntan al papel de plaza fuerte que desempeñó Donostia hasta pasada la mitad del siglo XIX. Según explica un vecino de Lezo en el blog «Historia de Gipuzkoa», la música militar, los cambios de guardia o los desfiles de los soldados parecen haber tenido gran influencia en el origen de la tamborrada.

Se sabe que los donostiarras parodiaban las marchas de los soldados desfilando vestidos cada uno a su guisa y tocando pequeños barriles. Con el paso del tiempo se le añadieron los tambores y se uniformaron los trajes, reproduciendo los utilizados por los batallones guipuzcoanos en aquella época. Más adelante se añadieron a la estética de la fiesta los trajes de cocinero y aguadora, pues otro de los supuestos orígenes se sitúa entorno a las dos fuentes públicas de Alde Zaharra de Donostia: Kañoieta -junto a la calle 31 de Agosto- y la de las Koxkeras, situada a un lado de la Iglesia de San Vicente.

Estas dos fuentes abastecían a los acuartelamientos de la ciudad, donde las aguadoras limpiaban sus barriles, y con los que repicaban las marchas durante los cambios de guardia. Parece ser que a partir de 1836 se trasladó la tamborrada al día de San Sebastián, pasando a convertirse desde entonces en la forma de homenajear al patrón de Donostia.

Participación «in crescendo»

La tradición, relativamente reciente, cuenta año tras año con un mayor número de participantes, y esta edición se ha alcanzado una cifra nunca antes vista. Mañana, día de San Sebastián, desfilarán a partir de las 12.00 horas por la ciudad 4.757 niñas y niños de 52 centros escolares diferentes, un ligero aumento respecto a los participantes del pasado año en el mismo desfile. Hoy en día casi todos los centro escolares cuentan con su propio batallón.

Echando la vista atrás, la Tamborrada Infantil se celebró por primera vez en el año 1927 por las calles de la Parte Vieja donostiarra. Un 20 de enero de aquel año, la compañía Euskal Billera, compuesta por niños de Alde Zaharra y el Muelle, se dirigió a la plaza de la Constitución recorriendo las calles Puyuelo -hoy en día denominada Fermín Calbetón-, Narrika e Iñigo.

A la vista del éxito del que gozó la comparsa, Euskal Billera siguió desfilando, aunque haciendo un inciso durante los años de la guerra de 1936-1939 o también en en 1969, durante el estado de excepción franquista.

Hasta 1961 la Tamborrada Infantil de Euskal Billera desfiló en solitario, pero a partir de esa fecha se formaron nuevas compañías aumentando de esta manera el número de tambores y barriles.

Más allá de las comparsas de los centros educativos, varias sociedades y asociaciones también cuentan con participación infantil propia, como Catalina de Erauso, Kresala Txiki, Intxaur Txiki e Infantil del Antiguo. Teniendo en cuenta todas estas participaciones, entre hoy y mañana serán 6.882 niños y niñas los que harán resonar tambores y barriles.

Precisamente lo harán esta misma tarde los infantiles de Catalina de Erauso a partir de las 16.30 horas por las calles de Amara Nuevo. En la Parte VVieja también habrá quien se ocupe de poner ambiente. Con la salida fijada en la plaza Zuloaga, los niños y niñas de Kresala Txiki desfilarán a partir de las 18:30 por Alde Zaharra.

Otra de las características de la fiesta del 20 de enero es que no entiende de edades, ya que participan activamente y por lo tanto disfrutan en ella tanto txikis como mayores. Según anunciaron desde el Ayuntamiento donostiarra, en la presente edición 107 tamborradas de adultos desfilarán por los diferentes barrios de la ciudad.

Al igual que ha ocurrido con los txikis, el número de las compañías de mayores se ha visto incrementada con cuatro nuevas incorporaciones: Erriberatarrak en Amara, Itsasburu e Irrintzi en Gros y Txirritako Txuri- urdinak en Larratxo, respectivamente. Tal como relató a GARA Iñaki Zabalza de la sociedad Itsaburu, tras muchos años intentando sacar adelante una tamborrada propia, este año lo han conseguido: «La verdad que no es tarea fácil porque hay que tener en cuenta un sinfín de cosas, pero nos lo propusimos en serio, y al final hemos formado un grupo majo, integrado por mujeres y hombres».

También en Martutene, al igual que en otros barrios celebran la festividad con su tamborrada particular y concretamente esta edición se cumplen quince años desde que saliera por primera vez. A medianoche de hoy izarán la bandera en el parque desde donde darán inicio al recorrido que concluirá a las 3.00 horas. Mañana volverán a salir, esta vez desde la cárcel dando por finalizada la fiesta a las 12.00 horas con la arriada de la bandera.

En lo que a bajas se refiere, se ha registrado una, en la compañía de la DYA. Por «problemas de organización» no participarán según han explicado, aunque han subrayado que «el año que viene volvemos seguro».

Englobando así tanto a menores como a adultos que durante 24 horas participarán activamente para festejar el día de San Sebastián, suman más de 20.000 personas, es decir, alrededor del 10% de la población donostiarra. Todos ellos recibirán la tradicional medalla de la Tamborrada, que en esta ocasión lucirá el escudo de la Real Sociedad de Fútbol con motivo de su reciente centenario.

Autobuses especiales

Lurraldebus ofrecerá hoy servicios nocturnos especiales en Donostialdea y Azpeitia con motivo de la celebración de la tamborrada, según anunció ayer la Diputación de Gipuzkoa.

Los servicios nocturnos especiales se implantarán en las líneas que unen la capital con los municipios de Donostialdea y también en la que comunica Azpeitia con Azkoitia y con Zumaia con el objetivo de ofrecer un medio de transporte «cómodo» que posibilite el desplazamiento de todos que desean acudir a la fiesta evitando el uso del coche particular y los problemas de aparcamiento. Para más información, visitar la página web de la compañía.